Se trata de un joven de 23 años que entró al país hace aproximadamente dos semanas, dijo Rivera a la prensa. “El está bajo la protección del Gobierno de Honduras y en esa situación se mantendrá de ahora en adelante”, añadió.
Aseguró que se ha montado “todo un modelo de seguridad dirigido a proteger y darle seguridad a él y su familia durante el tiempo que permanezcan en el país”.
“El es un testigo presencial del asesinato en Tamaulipas, ha ofrecido ya sus declaraciones ante las autoridades mexicanas y de Honduras, y estamos haciendo todo lo necesario para que él pueda retomar su vida en Honduras”, declaró.
Rivera dijo que de las 72 víctimas de la masacre de Tamaulipas, 23 han sido identificadas plenamente como hondureñas, de los cuales 16 han sido repatriadas y ocho se encuentran todavía en la capital azteca.
Dijo que esos cadáveres serán repatriados hasta que el Ministerio Público y el Registro Nacional de las Personas terminen los trabajos de identificación de 27 juegos de huellas dactilares de igual número de cadáveres que están en situación de no identificación”.
“Estamos seguros que en ese grupo de 27 hay más hondureños, y estamos a la espera que se concluya ese trabajo de identificación”.