Alrededor de 35 efectivos fueron removidos y trasladados a Tegucigalpa donde serán sometidos a capacitaciones.
“Se busca transparentar las actuaciones de los miembros de la institución policial y ante los hechos que se registraron el fin de semana en esa ciudad, el relevo era inminente”, dijo Bonilla a la prensa.
Agregó que la medida busca que el nuevo personal desempeñe sus funciones con independencia y sin temor en un corredor calificado como “caliente” por estar fronterizo con Guatemala, donde operan grupos delictivos.
Las unidades que fueron reemplazadas son: Dirección Nacional de Investigación Criminal, Policía Preventiva, Policía de Tránsito y la Dirección Nacional de Servicios Especiales de Investigación.