La propuesta fue formulada por el candidato opositor en el marco de la discusión de la cuarta urna que impulsa el presidente Manuel Zelaya a través de la cual se consultaría al pueblo en las elecciones del 29 de noviembre próximo sobre la conveniencia o no para reformar la Constitución política del país.
“Pepe” Lobo aclaró que su iniciativa no busca el continuismo del actual gobernante Manuel Zelaya Rosales ni de nadie que se elija en el futuro.
“Quiero empezar confirmando de una vez por todas que estoy total y absolutamente en contra del continuismo. Ni Pepe Lobo, ni el Partido Nacional, ni los hondureños permitiremos que nadie, ni el actual presidente, ni ningún presidente en el futuro, se quede un segundo más del periodo para el cual fue electo”, dijo.
Indicó que no es necesario hacer ninguna consulta o encuesta millonaria para saber que el pueblo quiere y que necesita un cambio, pero un cambio de verdad, no un cambio a medias, ni de maquillaje.
Apuntó que actualmente dos de cada tres hogares están viviendo en la pobreza, dos de cada cino niños sufren desnutrición, 20 hogares por día sufren la muerte de un familiar víctima de la delincuencia y la corrupción ha traspasado las fronteras patrias.
“Todos hemos cometido errores, pero sabemos enmendar. La experiencia nos dice que cuando llega el momento del cambio hay que hacerlo ya. Y para cambiar de verdad tenemos que cambiar la constitución”, aseveró en una comparecencia radial y televisiva.
El presidenciable nacionalista se preguntó ¿por qué algunos políticos ahora tienen miedo de oír al pueblo? ¿Por qué algunos ahora no quieren escuchar a la gente? ¿Por qué exageran los posibles efectos de reformar la Constitución y llenan al pueblo de temores?
“Yo les digo por qué: Porque no quieren oír lo que el pueblo va a decir, que quiere un cambio ya. No es momento de dejar las cosas como están, de no es momento para líderes sin experiencias, de vendedores de sueños que engañan al pueblo… “, afirmó.
En tal sentido, Lobo Sosa propuso la convocatoria a la escogencia de una Asamblea Constitucional, o Constituyente, pero con límites, sin violar las leyes actuales, que nos permita a los maestros, los jóvenes, los profesionales, los campesinos, los trabajadores, las iglesias, los emigrantes participar en la redacción de la misma.
Aseveró que los hondureños quieren un cambio, pero el camino ideal es que se establezcan legalmente las reglas para la Urna Constitucional, a través de la cual se consulte a los hondureños en las elecciones del 29 de noviembre, si están de acuerdo en que los propios ciudadanos hagan una nueva constitución…
“Pero eso sí, el cambio debemos hacerlo con responsabilidad. La Asamblea Constitucional tendrá como única tarea redactar una nueva Constitución, y no podrá quitar al nuevo Presidente que salga electo o disolver al Congreso en ejercicio o cambiar la Corte Suprema de Justicia”, advirtió.
El aspirante presidencial insistió que el cambio que propone no es a medias, sino uno de verdad “no un cambio a medias. Tenemos una nueva esperanza, vamos todos juntos por el cambio ya. Consulta si, continuismo no”.