Tegucigalpa – El presidenciable nacionalista, Nasry Asfura se dio un baño de masas este lunes al salir de los juzgados anticorrupción luego de comparecer en audiencia de imputados en un caso en el que se le acusa por varios delitos. “El que nada debe nada teme”, volvió a decir al tiempo que acentuó no creer ser víctima de persecución, aunque dijo: “en política todo se vale.
– No me detiene nadie, sólo Dios, apuntó el líder nacionalista.
Ante decenas de nacionalistas volvió a reiterar su inocencia en este caso por el cual es señalado por la presunta comisión de delitos como lavado de activos, malversación de caudales, fraude, uso de documentos públicos falsos y violación de los deberes de los funcionarios.
“22 millones (lempiras) pusimos en fianza todos para que el Ministerio Público se sintiera tranquilo, que no hay nada atrás, y nadie está saliendo a la carrera y huyendo”, dijo al salir de la audiencia de imputados en la que le dictaron medidas distintas a prisión.
Apuntó que la acusación es exactamente la misma que le presentaron hace cuatro años, “no cambió ni un punto ni una coma, lo que pasa que antes tenía antejuicio y ahora la UFERCO argumenta que no tengo derecho a antejuicio y ahora soy un ciudadano común y corriente”.
Citó que sigue firme trabajando en su precandidatura presidencial, y el fin de semana visitó 14 municipios de Comayagua y Santa Bárbara.
Asfura confesó que contó un cuento, una analogía en la audiencia: cuando paran un padrecito, y le dicen pongan la vía, las luces, luego le consultan cómo hacen para andar todo bien, a lo que respondió: ‘hijo mío yo siempre ando con Dios’.
Se negó a hablar de persecución política en su contra, aunque sí afirmó: “En política todo se vale y todo se puede, pero vamos para adelante firme”.
El exalcalde reveló que tiene avanzados en un 95 % la conformación de sus planillas en todos los niveles electivos, así como las autoridades del partido.
Insistió que no teme ir a la cárcel porque el que nada debe, nada teme.
Mencionó que la Fiscalía le aseguró sus propiedades, pero ya se las devolvió, por lo que dijo no entender cómo funciona la justicia.
Consultado sobre si la acusación en su contra afectará a las pretensiones del Partido Nacional, el presidenciable expresó que nada tiene que ver el instituto político porque es una acción contra una persona. “Aquí cada uno de nosotros somos responsables, lo he dicho siempre, de nuestros actos, el Partido Nacional como institución no tiene culpa de nada, nosotros somos los que tenemos que defenderlos como personas”.
Pidió a la UFERCO y al MP que trabajen de acuerdo a lo que señala la ley. “Me voy porque hay que trabajar”, se despidió mientras era vitoreado por decenas de simpatizantes que lo esperaban en las afueras de los juzgados capitalinos.
Luego, en una tarima improvisada en las afueras de los juzgados ofreció algunas palabras a sus simpatizantes. Les pidió tranquilidad y les ofreció su agradecimiento por el apoyo. JS