«El golpe en Honduras es un retroceso inaceptable. Los golpistas tienen que entender que la voluntad de los pueblos es soberana», afirmó Lula al referirse a la crisis en el país centroamericano en un breve pronunciamiento que concedió tras su encuentro con Funes.
«Brasil, El Salvador, el Mercosur, la Unasur, la OEA… Estamos Unidos. No reconoceremos las elecciones (del 29 de noviembre) convocadas por el Gobierno de facto de Honduras», agregó el presidente brasileño al insistir en que la solución de la crisis exige como primer paso el regreso al poder sin condiciones del presidente depuesto.
Lula agregó que las medidas anunciadas recientemente por Estados Unidos contra el Ejecutivo de Roberto Micheletti, nombrado por el Congreso en lugar de Zelaya, muestran que Washington también defiende la misma posición.
«Las medidas de (el presidente estadounidense, Barack) Obama son bienvenidas. Significan que EE.UU. se sumó a la posición regional», afirmó.
«Hay que revertir el retroceso democrático», dijo por su parte Funes, que, con su encuentro con Lula, inició hoy una visita de dos días a Brasil.
El presidente salvadoreño pretende aprovechar su viaje para pedir la continuidad de proyectos de cooperación ya en desarrollo en el área social, principalmente en el área de biocombustibles.
Igualmente pretende ofrecer a su país como una puerta de entrada de productos brasileños a Estados Unidos gracias al acuerdo de libre comercio que El Salvador tiene con la mayor economía mundial.







