Tegucigalpa– Lo que se ha encontrado en las requisas realizadas por la Policía Militar “es menos del 3% de lo que viene”, dijo hoy el director de esa unidad castrense, coronel Ramiro Muñoz, al pedir espacio para consolidar las acciones que conduzcan a la gobernabilidad del sistema penitenciario.
El funcionario señaló que el desafió que ha recibido la Policía Militar del Orden Público (PMOP), al ser responsable de la administración y manejo de todas las cárceles hondureñas es enorme y que representa el desmontaje de estructuras coludidas con el crimen.
Por lo que advirtió que los funcionarios que se encuentren vinculados a actividades ilícitas o de complicidad con los reclusos no se les aplicarán medidas en tribunales de honor ni en instancias militares, sino que serán remitidos al Ministerio Público.
Esos criterios fueron refrendados por el contraalmirante José Jorge Fortín, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, quien compareció junto a Muños y el titular de Defensa, José Manuel Zelaya en el foro televisivo Frente a Frente.
Muñoz apostilló que la corrupción en las cárceles es de gran magnitud y que las misma vincula a fuerzas externas a esos centros penales, -“si solo quitamos una cosa: la corrupción, habremos logrado algo importante”,- señaló el jefe de la PM, ahora bajo el control de todos los centros penitenciaros en Honduras.
Para este jefe militar el problema de las cárceles es un problema de seguridad nacional y detalló como dentro de las mismas se han encontrado poderosos arsenales, sofisticadas conexiones telefónicas, servicios de comunicación satelitales, cientos de televisores y una amplia gama de herramientas que facilitan la proliferación del crimen tanto dentro de las cárceles como fuera de esos recintos.
Respecto al papel de la Policía Nacional, que hasta dos semanas era la responsable de las cárceles tenía en esos centros, el contraalmirante dijo que no prefería referirse ni calificar a la administración anterior ya que los hallazgos dentro de las cárceles han mostrado la presunta colusión entre autoridades y los grupos criminales.
Fortín también se refirió al tema de los derechos humanos en las cárceles y aunque dijo que respetaran subrayó que para ellos como nuevos responsables de la administración penitenciaria primarán los derechos de los hondureños y ciudadanos por encima de quienes han cometido crímenes.
“No vamos a permitir el caballito de batalla que se están violando los derechos humanos de estas mansas palomas (reclusos o privados de libertad)”, refrendó el máximo jerarca militar. PD