Tegucigalpa – En el Triángulo Norte de Centroamérica, las fronteras son algo más que el límite de las naciones, el control de los visados o los permisos de introducción o salida de mercancías. Son fuentes de poder y puertas para operaciones clandestinas.
En su dinámica cotidiana, los pasos en el istmo develan trata de personas, narcotráfico, son portillos para el escape o cobijo de pandilleros, dan cabida al resguardo de caletas de “tesoros negros” y por ellas se deslizan abigeos, peligrosos delincuentes y contrabandistas, así como protagonistas de las más inimaginables acciones propias de oscuros submundos.
En las últimas décadas, en esas zonas fronterizas hondureñas la ausencia de estrategias, la complicidad y el abandono han marcado una dinámica que retrata el accionar de las fuerzas del orden.
Los procesos de depuración y recomposición de la Policía Nacional, también contemplan esas sensibles áreas para la seguridad nacional y ciudadana en Honduras.
En ese contexto se replantean nuevas estrategias y se implementan planes para frenar las operaciones del crimen y lograr que personal calificado mantenga el control, dijo a Proceso Digital el nuevo director nacional de la Policía de Fronteras, comisario Ángel Luque.
Para el caso citó que elcontrabando de mercaderías, específicamente cigarrillos, cervezas, café y otros productos, ha sido una actividad contante en las fronteras y para contrarrestarla, dijo, las acciones policiales toman forma. “Estamos en un proceso de reestructuración institucional y la Policía de Fronteras no es la excepción, venimos de lo que antes era la Dirección Nacional de Servicios Especiales de Investigación (DNSEI) y ahora se ha delegado a mi persona conformar y estructurar esta nueva Dirección de Policía de Fronteras”.
Detalló que dentro de esa dinámica se está capacitando un nuevo bloque de personal, asignado para ser desplegado en las zonas fronterizas con Guatemala, El Salvador y Nicaragua.
Cruce de pandilleros y otros criminales
Los crímenes trasnacionales tienen en el Triángulo Norte un asidero. Carteles de la droga, bandas de secuestradores, ladrones de vehículos y jefes pandilleros han operado en la zona, muchos vinculados al cártel de Sinaloa, a los Zetas y a otros grupos criminales, según informes de operadores de justicia.
Honduras se ha visto seriamente afectada con acciones de pandilleros salvadoreños que buscan extender sus dominios y despliegan sus redes por este país, a través de sus fronteras. Ingresan sin control, muchos de ellos se ubican en poblados donde materializan sus acciones criminales, otros llegan a las principales ciudades a establecer contacto con sus homólogos en cárceles o dominios del crimen y algunos hasta han montado escuelas para enseñar códigos y lenguajes indescifrables a los pandilleros hondureños, han revelado fuentes de seguridad.
Los carteles y sus tesoros
Las zonas fronterizas también han sido estratégicas para criminales organizados como el cartel de los Valle, que no solo ha mantenido refugios entre montañas y puntos ciegos del sector occidental, sino que ha usado esos bosques para esconder botines tal y como se quedó retratado en el controversial hallazgo de fardos de dinero y otras valiosas pertenencias, durante la captura de dos de sus principales cabezas en las colindancias entre Honduras y Guatemala.
Contrabando de hormiga
También el contrabando de hormiga y a gran escala sigue campeando en las tres fronteras que Honduras tiene con Guatemala, El Salvador y Nicaragua en la víspera de la entrada en vigencia de la Unión Aduanera, lo que representa otro gran desafío para las autoridades del país, así lo manifestó el comisario Ángel Luque, quien a su vez detallóque en esa dinámica se está capacitando un nuevo bloque de personal que se le ha asignado para poder desplegarlo hacia las zonas más sensibles.
Por ello, dijo el jefe de la Policía de Fronteras, se han establecido alianzas con instituciones especializadas a fin de que las mismas puedan proporcionar instructores que puedan capacitar a ese nuevo personal y con ello lograr elevar el nivel de efectividad que tengan una vez que proceda a desplegarse.
Luque precisó que hace aproximadamente un mes se procedió a abrir cuatro puntos fronterizos, ya por parte de la Policía de Fronteras, que incluyen Guasaule, El Amatillo, Corinto y Agua Caliente, donde labora personal que ha sido capacitado para detectar el contrabando de cigarrillos al que no se le ha prestado interés, aunque se trata de un producto que causa mucho daño, tanto a la salud de los consumidores como a la economía del país.
Ejemplificó los logros al detallar que en el puesto de control de Pavana se detuvo a una mujer que llevaba un alijo de cajetillas de cigarrillos y al ser revisado el vehículo en que se transportaba, se encontró que el producto no reunía las características del original que se distribuye localmente, lo que activó una alerta y se procedió a hacer el decomiso, mientras que la persona detenida fue entregada a la Fiscalía para que rindiera la declaración y diera la referencia de dónde había comprado esos cigarrillos.
Arguyó que ese es el empoderamiento que debe tener el nuevo policía de fronteras, ya que en los límites territoriales de Honduras con los países vecinos “se da de todo”.
Refirió que los puestos fronterizos aduaneros de El Amatillo y Guasaule, en las zonas sur y oriental del país, hay un gran comercio de “hormiga” y una tendencia al fraude fiscal.
Luque admitió que el contrabando en las zonas fronterizas es a diario, pero recalcó que los esfuerzos interagenciales son estructurados en todas las fronteras. Igualmente destacó la presencia de la Fuerza de Tarea Maya Chortí en el occidente del país, así como la reciente creación de la Fuerza de Tarea Lenca-Sumpul que se encargará de vigilar la zona fronteriza con El Salvador.
El café
El jefe policial reconoció que en la zona occidental el contrabando de café se da en detrimento de la economía nacional.
Aseveró que recientemente, la Fuerza Maya Chortí ha hecho decomisos de furgones y camiones cargados del aromático grano. Citó el caso de un furgón que iba con su documentación, amparado en el régimen aduanero, con su marchame, pero cuando se procedió a abrirlo, se descubrió que no llevaba nada de lo declarado, sino que un cargamento de café.
Desventajas tecnológicas
Para el director nacional de la Policía de Fronteras, Honduras tiene desventajas tecnológicas respecto a El Salvador que cuenta en la aduana con un escáner para revisar los furgones y camiones, una herramienta de la que los nacionales están desprovistos.
A juicio del comisario Ángel Luque, Corinto (en la zona departamental de Cortés) se constituirá en la principal aduana de tránsito comercial entre Honduras y Guatemala una vez entre en vigencia plena la Unión Aduanera. Por ello, informó que, a finales de octubre, comienzan las prácticas para que en diciembre inicie la facilitación y el libre tránsito de mercancías y personas.
Este paso de unificación plantea además nuevos formatos de documentación, digitalizados, y nuevos protocolos d seguridad que deberán adecuarse a esa estrategia de facilitación del comercio que irá paulatinamente incorporándose en los demás puestos aduaneros.
Argumentó que si va a haber facilitación del comercio ya no habrá inspección en las aduanas, pero existen una infinidad de puntos ciegos a lo largo de frontera que representan un gran desafío ya que actualmente se están realizando patrullajes de control, pero no hay una vigilancia permanente.
De tal suerte que las zonas fronterizas en el Triángulo Norte discurren entre el tráfico humano, el tránsito de indocumentados que llegan cada vez más y de una gama de nacionalidades del mundo y a los que se suman diariamente cientos de hondureños que salen en su afán de llegar a Estados Unidos; el narcotráfico, las operaciones de bandas multinacionales, los contrabandistas y un sinfín de actividades encubiertas. El desafío pasa por el combate a la inseguridad en un esfuerzo regional que da pasitos.