Tegucigalpa – El jefe de la bancada en el Parlamento del opositor Partido Nacional de Honduras, Tomás Zambrano, denunció este lunes un «autogolpe» a la vez que acusó al expresidente Manuel Zelaya, al frente del oficialista Partido Libre, de promover acciones para obstaculizar el escrutinio especial y retrasar la declaratoria oficial de las elecciones generales del pasado 30 de noviembre.
«Atención comunidad internacional, países amigos y observadores del proceso electoral, se les alerta de un autogolpe en Honduras. Mel (Manuel) Zelaya, el destructor de la democracia, que ha sido el poder detrás del trono durante estos cuatro años de gobierno de Libre, se aferra a no dejar el poder y llama a sus violentos colectivos a las calles para evitar el proceso de conteo voto por voto en el escrutinio especial para que no haya declaratoria», subrayó Zambrano en la red social X.
Este lunes, militantes del izquierdista Partido Libre salieron en pequeños grupos a las calles, quemando neumáticos y lanzando piedras, en protesta contra el proceso electoral, tras el llamado a movilización que hizo el sábado su coordinador general, Manuel Zelaya, esposo y principal asesor de la presidenta hondureña, Xiomara Castro.
Zambrano alertó además sobre una supuesta «alianza» entre Libre y el candidato Salvador Nasralla, del Partido Liberal, que busca «desconocer los resultados» que, según él, otorgan la victoria al aspirante Nasry ‘Tito’ Asfura, del conservador Partido Nacional y apoyado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Asfura encabeza el conteo con el 40,54 %, seguido de Nasralla, con el 39,19 %, con un margen de diferencia de 43.184 votos, mientras que la candidata de Libre, Rixi Moncada, permanece en el tercer puesto, con el 19,29 % de las papeletas, según el 99,80 % de las actas escrutadas de los resultados preliminares oficiales.
Zambrano instó a la ciudadanía a respaldar a las consejeras del CNE Ana Paola Hall (presidenta) y Cossette López, para que el conteo «se reanude y se declare a un ganador» de los comicios para que «prevalezca la democracia sobre el caos del socialismo del siglo XXI y sus nuevos socios».
Destacó que las Fuerzas Armadas tienen «la responsabilidad» de asegurar el respeto a la voluntad popular expresada en las elecciones y garantizar que «el familión» (grupo político vinculado al expresidente Zelaya) «entregue el poder el 27 de enero y tome posesión el nuevo presidente electo por la mayoría de los hondureños».
El escrutinio especial, previsto inicialmente para el sábado, aún no ha comenzado debido a obstáculos administrativos, retrasos en la acreditación de los representantes de los partidos y a que la empresa encargada del soporte tecnológico solicitó repetir el triple sellado del software, pese a que dicho procedimiento ya se había realizado el viernes.
El CNE dispone de un plazo de 30 días desde la celebración de los comicios para oficializar los resultados finales de unas elecciones en las que los hondureños eligieron al sucesor de la presidenta Castro, así como a tres designados presidenciales (vicepresidentes), 298 alcaldes, 128 diputados nacionales y 20 para el Parlamento Centroamericano. EFE







