Ciudad de Guatemala – El fiscal anticorrupción guatemalteco Juan Francisco Sandoval abandonó este sábado el país centroamericano, vía El Salvador, para ir al exilio después de haber sido destituido el viernes por la jefa del Ministerio Público, Consuelo Porras.
Sandoval viajó vía terrestre hasta la frontera de las Chinamas para dejar Guatemala e ingresar en El Salvador, según confirmó el Procurador de los Derechos Humanos, Jordán Rodas, quien lo acompañó hasta abandonar el territorio, sin que se divulgara el destino final del abogado.
La salida del país del ahora exfiscal anticorrupción se registró solo horas después de una maratónica conferencia de prensa el viernes por la noche, en la que expuso que la fiscal general Porras ha detenido diversas investigaciones en contra del Gobierno actual que preside Alejandro Giammattei.
«Soy el último de los fiscales que ha sufrido por buscar la verdad», explicó Sandoval el viernes en la Procuraduría de los Derechos Humanos, donde se llevó a cabo la rueda de prensa.
Sandoval, principal bastión de la lucha anticorrupción en Guatemala durante los últimos tres años, fue destituido este viernes por decisión de Porras por supuestos «abusos y frecuentes atropellos» a la institucionalidad de la entidad.
Porras alegó en un comunicado de prensa que fue víctima de «vejámenes» y que por ello tomó la decisión de dar por «terminado el vínculo laboral» con el fiscal.
Sandoval, de 38 años, fue pieza clave para la lucha anticorrupción en Guatemala que tuvo su gran auge entre 2014 y 2019 de la mano de la exfiscal general (2014-2018) Thelma Aldana y también del director de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), el abogado colombiano Iván Velásquez.
Las pesquisas comandadas por Sandoval, Aldana y Velásquez destaparon docenas de casos de corrupción estatal, imputando a más de 200 personas entre ministros, funcionarios, empresarios y también a los expresidentes Otto Pérez Molina (2012-2015) y Álvaro Colom Caballeros (2008-2012).
Precisamente Aldana (2014-2018) instó el viernes a Sandoval, mediante sus redes sociales, a que se vaya al exilio junto a ella en Estados Unidos, después de ser removido de su cargo.
Aldana, a quien se le prohibió competir en la elección presidencial de 2019, aseguró que espera a Sandoval en Estados Unidos, país donde vive en calidad de asilada política desde hace dos años, tras liderar junto al ahora exfiscal una extensa lucha anticorrupción en Guatemala entre 2014 y 2019.
«Acá en Estados Unidos lo esperamos Juan Francisco Sandoval, seremos siete fiscales de Guatemala en el exilio. La mafia nunca ganará. Juntos volveremos a nuestro país, uniremos fuerzas con el pueblo», subrayó Aldana.
La salida del país de Sandoval obedece a motivos de seguridad y también a la posibilidad de que sea perseguido judicialmente tras sus investigaciones, según expertos.
INVESTIGACIONES INCÓMODAS
Sandoval explicó en la ruedad de prensa del viernes que desde 2019, cuando Porras tomó posesión nombrada por el expresidente Jimmy Morales (2016-2020), el poder de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), bajo su cargo, fue disminuyendo, principalmente cuando se involucraron en pesquisas contra el actual Gobierno.
Según dijosel abogado, una investigación en noviembre de 2020 vinculada al exministro de Comunicaciones durante la Administración de Morales, Jose Luis Benito, actualmente prófugo, «incomodó demasiado» a ciertos grupos de poder.
La investigación en contra de Benito se originó después de que Sandoval y su equipo encontraran casi 17 millones de dólares en efectivo en una residencia en Antigua Guatemala, 50 kilómetros al oeste de la capital del país.
El dinero estaba en varias maletas, una de ellas con el nombre de Benito por su uso en un viaje a España. Los hilos de las pesquisas por el dinero llevaron a Sandoval a investigar a Giorgio Bruni, exsecretario privado del actual presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei.
«Se requirió declaración del secretario privado y desde ese momento los ataques se incrementaron», expuso el jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad.
De acuerdo con el ahora exfuncionario anticorrupción, Porras detuvo investigaciones de alto impacto sobre jueces, diputados y otras autoridades mediante traslados de expedientes, remoción de fiscales, prohibiciones para operativos, «retraso» de procesos y «agilizar lo que le conviene»
El Gobierno de Giammattei indicó brevemente a periodistas el viernes que respetaba la independencia judicial tras la decisión de Porras. JP