Tegucigalpa – El exdirector de Centros Penales en Honduras, Danilo Orellana dijo que las medidas anunciadas por el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad (CNDS), sólo tendrá éxito si hay buenos asesores que orienten estas políticas para contrarrestar el crimen.
– Abogó que el 911 pase a manos de la Policía Nacional y que ya no sea operada por pega-afiches.
Sobre la idea de construir una híper cárcel, entre Olancho y Gracias a Dios, refirió que “habría que ver quién les hizo el estudio y si habrá asesoría en ese sentido”.
“Aquí no hay que engañarse, hay que asesorarse para no dar tumbos, o están pensando en política que ellos van a continuar, pero que tal que pierden las elecciones, quién continuará las obras iniciadas, es por eso que debe haber un plan de país”, sugirió.
El comisionado en el retiro, reconoció que las estructuras de maras y pandillas son de los principales problemas que enfrenta Honduras en materia de seguridad, aunque obviamente el crimen organizado es otro de los flancos que deben ser atacados con dureza.
Dijo que el problema debe ser analizado como toda una política criminal del Estado, es decir estrategias a las que se les debe dar seguimiento incluso más allá de un periodo de gobierno.
Mencionó que cuando la Tasa de Seguridad pasó a la administración del gobierno en la gestión de Porfirio Lobo a solicitud del entonces secretario de Seguridad, Óscar Álvarez, fue una buena idea que se copió de Colombia, sin embargo en la administración de Juan Orlando Hernández a los fondos se le dieron otros destinos.
Cuestionó que uno de uno de los peores desaciertos es colocar pega-afiches en el servicio del 911. Esta herramienta de seguridad debe estar gerenciada por oficiales expertos de la Policía que son los que conocen la realidad en el trabajo de campo. JS