Tegucigalpa – El crimen contra mi esposa fue planificado, no fue un asalto, se la llevaron a un cuarto privado y le dispararon en la sien, la mató un profesional y fue una muerte sin sentido, manifestó este miércoles el abogado Andrés Wilfredo Urtecho Jeamborde, esposo de exdiputada Carolina Echeverría Haylock asesinada la noche del pasado domingo 25 de julio en Tegucigalpa, capital de Honduras.
-Llegaron cuatro hombres y una mujer vestidos de médicos tenían información muy privada, dijo.
–Lamentó que la Policía Nacional no tenga los suficientes recursos para proteger a los abogados en Honduras.
-Reveló que su error fue desistir de la protección de la Policía porque creyó que no hacía falta, porque nunca se imaginó que algo podría pasarle.
-Dijo que tiene salud estable y que su recuperación por el COVID marcha por buen camino y que piensa seguir litigando.
A escasos dos días de haber ocurrido el crimen contra su esposa, el abogado Urtecho rompió el silencio y contó con detalles y paso por paso cómo ocurrieron los hechos en el suceso donde casi pierde la vida producto del atentado, en ese contexto dijo que decidió hablar para desvirtuar varias hipótesis y pedir a las autoridades competentes que investiguen al tiempo que aseguró que tienen grabaciones de lo ocurrido.
Los criminales manejaron información confidencial
Inicialmente manifestó en declaraciones a Radio América que los asesinos de su esposa llegaron vestidos de médicos porque sabían que en su hogar había gente contagiada con COVID-19 “esa información solo la podría saber gente de la casa, donde estaban tres trabajadores, una sobrina, mi esposa, mi hijo y su esposa”.
Relató que, le pidió a su esposa que saliera de la casa porque ella no estaba contagiada de COVID “pero ella no quiso abandonarme y se quedó para atender la casa en estos últimos cuatro días, ella abrió la puerta, se confió, la encañonaron a ella y a una enfermera, inmediatamente uno subió al área de habitaciones y desconozco cómo sabían eso”.
“Yo estaba viendo todo por la cámara, la llevaron al cuarto mío para que se escondiera y cerrará la puerta, cuando salgo al pasillo con la pistola en la mano les hice como 11 disparos, cuando iba a dispararle al individuo, el arma se me enconchó y en eso sube otro delincuente y tienen a mi esposa enfrente apuntándole a la cabeza, mi esposa volteó la cara hacia mí y en eso le dispararon en la sien izquierda”, relató el entrevistado.
Fuego cruzado contra cinco pistoleros
Consecuentemente relató que el crimen contra su esposa fue un vil asesinato y que en ningún momento se trató de un asalto porque en ese momento ya estaba frustrado, fue un crimen sin sentido “así fueron los hechos como se los estoy contando, como buen olanchano le dejamos las cosas a Dios para que sea él quien haga el trabajo”.
Según el abogado, los entes de investigación tienen un caso muy importante para esclarecer porque si penetraron la casa y ella era el objetivo, al abrir la puerta la hubieran matado “y no lo hicieron, sino hasta después de 12 disparos que hicieron los delincuentes contra mi persona, es la investigación que tiene que dar con los responsables para que se paren de una vez por todas este tipo de asesinatos”.
Y consultado si era él el objetivo de los pistoleros, respondió que no lo sabe y presume que ellos se molestaron por el fuego cruzado y por eso mataron a su esposa, “yo estaba protegido en una puertas y aún así recibí un disparo en la rodilla y otro en el brazo izquierdo “los delincuentes se ofuscaron, porque al intentar disparar se trabó la pistola, la destrabe y se volvió a trabar, ahí me di cuenta que la pistola no iba a ayudarme, pero como la tenía en la mano no terminaron de dispararme”.
A mí esposa la intentaron sobornar
Descartó que su esposa y él hayan recibido amenazas de muerte; sostiene que tiene varias hipótesis que de ahí podría haber venido el ataque pero prefirió no revelarlas porque vive en una ciudad donde ya no se puede vivir, dijo que teme por su vida desde el momento en que el enfrentamiento duró unos 20 minutos en su casa ubicada a dos cuadras de la casa de gobierno y la policía llega hasta que todo pasó.
Según el profesional del derecho, nunca ha tenido problemas con alguien, descartó que sea una represalia que provenga de las acciones que realizó cuando fue jefe de la Policía Nacional porque eso pasó hace más de 21 años “la casa es segura, fue algo planificado y el único error fue abrir la puerta y ahora solo queda capturar a los responsables”.
También negó que el crimen contra su esposa tenga que ver con las aspiraciones políticas, aunque es muy temprano para descartarlo, una vez le mandaron a ofrecer 10 millones de lempiras para que desistiera a la diputación pero ella respondió que no “sin embargo particularmente no creo que sea algo político porque eso sí sería nefasto, tener que matar candidatos eso sería lo peor que le podría pasar al país”.
Un criminal nato mató a mi esposa
Afirmó que la exdiputada pensaba que la carretera que se construye en La Mosquitia hondureña era necesaria pero que temía por el daño que se le podría hacer a la Biosfera del Río Plátano, es por eso que ella siempre evitó pronunciarse sobre el tema, porque sabía que ese era un asunto conflictivo “no creo que haya sido por eso, pero que sean las investigaciones la que encarguen de este caso”, precisó.
“Mi esposa se oponía rotundamente a la implementación de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE) y todos sabemos que esos son proyectos donde se mueve mucho dinero, pero repito, debemos esperar a ver qué dirán las investigaciones”, añadió y recordó que lo único que hizo cuando fue jefe policial solo se dedicó a servir a Honduras.
Finalizó diciendo “no le abran la puerta a nadie, ese fue un grave error, sea quien sea; nos equivocamos en eso, matar a mi esposa fue un hecho sin sentido, le tenían la pistola en la frente, ella volteó la cara a la derecha, el disparo entró por la sien izquierda, a ella la mató un asesino nato, porque mató a una mujer que no le estaba amenazando en nada”. JP
