San Pedro Sula – Autoridades edilicias del municipio de Villanueva, Cortés, norte de Honduras iniciaron este jueves la instalación de energía eléctrica y agua potable en el hospital móvil que hace varias semanas permanecía abandonado en un predio de esa localidad y se espera que el próximo viernes entre en funcionamiento.
Tras pláticas entre funcionarios locales y de la Secretaría deSalud, determinaron que la municipalidad de Villanueva, Cortés, contribuirá con la instalación de los servicios básicos y por parte del gobierno, contratarían a personal médico que atendería a los pacientes que lleguen hasta esa clínica móvil.
Las cuadrillas tienen previsto culminar de proveer al hospital con estos servicios públicos en dos días y al terminar ese proceso, se comenzará a equipar el centro asistencial que en un principio la Secretaría de Salud dijo que desconocía sobre su existencia.
El lugar donde fue ubicado es en un campo de una iglesia evangélica local donde instalaron tres transformadores para llevar el fluido eléctrico al lugar provisto para atender casos de coronavirus en la región más afectada del país.
Según se conoció, el costo de instalar los servicios básicos para el hospital móvil es de 700 mil lempiras, pero gracias a donaciones y el aporte de la municipalidad de Villanueva, ese valor se redujo en un 70 por ciento.
El departamento de Cortés contabiliza alrededor de mil 47 casos, los cuales en su mayoría se reportan en el Valle de Sula, siendo la ciudad de San Pedro Sula el epicentro.
