Pero, a medida que la Luna penetre en las profundidades de la sombra terrestre los cambios se irán produciendo poco a poco.
A partir de las 9.52 GMT el color de la Luna no será el gris que vemos todas las noches y pasará a ser roja, como un sol en el ocaso, añadió. En esos momentos, el eclipse de Luna será total y durará casi 90 minutos.
El fenómeno astronómico será visible en todo el territorio de Estados Unidos, en Australia, partes de Asia y la mayor parte del continente, pero no en África o en Europa.
El eclipse constituye una oportunidad especial para los científicos e ingenieros de la agencia espacial estadounidense que ya comenzaron los preparativos para el retorno del hombre a la Luna casi 40 años después de que Neil Armstrong pisara la superficie del satélite natural de la Tierra.
El próximo año, la NASA lanzará el «Lunar Reconnaissance Orbiter» para realizar un estudio cartográfico total de la Luna, incluyendo su topografía, la temperatura y los recursos que podría encontrar el hombre, además de los peligros que acechan, dijo la NASA.