El comisario Amador Roque se desempeñaba como jefe distrital de la posta de Belén, en el sector de Comayagüela de la capital hondureña.
De acuerdo al vocero de la Policía Nacional, el comisario Amador Roque fue interceptado por sus asesinos a la altura del semáforo de la colonia Prado que comunica con el Estadio Nacional.
El vehículo en que se transportaba el jefe policial fue robado por los asesinos aunque se investigan las verdaderas causas del crimen.
La muerte de policías ha sido constante en los últimos años. El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) reporta la muerte de 79 uniformado en los últimos años.