spot_img

Promesas electorales de Trump estrangularían economía hondureña

Tegucigalpa – La pesadilla política y económica para las naciones centroamericanas y México comenzó a correr justo cuando los dos grandes partidos, el Demócrata y el Republicano, de Estados Unidos nominaron oficialmente a sus candidatos presidenciales y concluyeron sus convenciones que significa de hecho el tiro de salida de cara a las elecciones generales del martes 8 de noviembre cuando más de 190 millones de electores votarán para elegir al futuro titular de la Casa Blanca.

– El candidato republicano y sus aliados tienen en la mira el control de los envíos de remesas, que a Honduras le ingresa casi 4 mil millones de dólares, con los cuales se financian cientos de miles de  familias y favorecen  la estabilidad del tipo de cambio.

– La revisión de los tratados comerciales sería perjudicial para la maquila y es una amenaza para los 135 mil empleos que genera

Donald Trump y los republicanos primero y luego Hillary Clinton y los demócratas después cumplieron con el rito político estadounidense de celebrar sus convenciones anuales donde los previamente elegidos en las primarias y caucus aceptan oficialmente las nominaciones partidarias para disputar la Presidencia de Estados Unidos, el cargo de elección popular más poderoso en el mundo al tener que dirigir la mayor economía del globo y ser el comandante en jefe de la más poderosa maquinaria de guerra creada, después de las que el Imperio Romano hizo hace miles de años.

Donald Trump y Hillary Clinton

Ahora los dos candidatos presidenciales cuentan con tres meses y una semana para desarrollar la principal campaña de marketing y propaganda política que el planeta conoce y donde desde ya se da por sentado que los ataques y golpes bajos serán la norma y no la excepción en los próximos días, tal como suele ocurrir en las campañas presidenciales norteamericanas.

La irrupción del volcán Trump en la política norteamericana dejó desconcertados a los expertos y a la clase política tradicional, ya que se dedicó en las primarias y hasta la convención republicana a romper cuanta regla había sido establecida por más de dos siglos en las campañas electorales.

Pero donde Trump más se dio a conocer fue en el tema de inmigración, los pactos comerciales y la elevación de muros algo que Centroamérica y México, especialmente la primera, no pueden observar con indiferencia.

Tal como lo hizo en la campaña, lo refrendo y oficializó durante su discurso de aceptación de la candidatura presidencial republicana, Trump ofreció levantar un muro en la frontera con México para evitar la llegada de inmigrantes indocumentados, cancelar los pactos comerciales y perseguir a los millones de indocumentados que ya viven en Estados Unidos.

Además de afectar a México, que es el favorito de sus ataques, las naciones centroamericanas serían golpeadas en la columna vertebral de sus economías, especialmente las que conforman el Triángulo Norte centroamericano (Guatemala, El Salvador y Honduras). 

Alerta para Honduras

Las propuestas de Trump y sus seguidores son como para declarar una alerta, señaló un especialista económico que no quiso ser identificado por la sensibilidad del tema, indicando que un triunfo del republicano y la aplicación de sus propuestas provocarían una crisis económica sin parangón.

 

El aspirante de los republicanos a suceder al actual presidente Barack Obama no claudica ante sus posiciones de construir el muro en la frontera mexicana, que alardea hará que lo paguen los mexicanos, así como iniciar la persecución de los millones de indocumentados que viven en suelo estadounidense.

Protesta a donald trump

Aunque las dos propuestas han sido rechazadas por los activistas pro inmigrantes y la clase política tradicional de Estados Unidos, no son pocos los que consideran que nadie debe ignorar esas amenazas, en especial por la actitud de Trump de confrontar lo que se denomina “políticamente correcto”.

 

“Muro” a las remesas

Lo que preocupa a los especialistas es que Trump, más algunos aliados republicanos en el Congreso, buscan financiar sus proyectos de mayor seguridad y la construcción del muro afectando el tema de las cruciales remesas que envían los inmigrantes a sus familias.

Trump ha respondido a quienes señalan que el muro no puede ser financiado y a los señalamientos mexicanos que ni un peso se destinará a ese fin, afirmando que “México debe pagar por ese muro” y que si no lo hace su futura administración se esforzará por “incautar todos los pagos de remesas derivados de los salarios ilegales”,.

Pero no solo el aspirante republicano a la Casa Blanca propone bloquear o gravar el envió de remesas, ya que el senador de ese mismo partido por Lousiana, David Vitter, propuso crear un “muro virtual” a los inmigrantes al dificultarles que despachen el dinero a sus países de origen.

Envio de remesas

La propuesta de Vitter, escrita en un artículo en la revista “The Washington Examiner”, señala que cualquier persona que desee enviar dinero (remesas) fuera de Estados Unidos debe demostrar su estadía legal en suelo norteamericano, de lo contrario debe pagar una tasa extra a la comisión que ya pagan y con el cual propone financiar más programas de seguridad en la frontera.

 

Una regulación o congelamiento en el envió de remesas de parte de los hondureños indocumentados en Estados Unidos sería un golpe al corazón de la economía de Honduras.

 

Los más del millón de hondureños que residen en Estados Unidos son parte de la columna vertebral de la economía hondureña al mandar miles de millones de dólares a sus familias en Honduras.

 

El presidente del Banco Central de Honduras (BCH), Manuel Bautista, informó recientemente que hasta julio pasado los hondureños habían enviado más de dos mil millones de dólares en remesas y que la meta al final del 2016 es que se perciban casi 4 mil millones de dólares, la gran mayoría procedente de Estados Unidos.

 

Ello representa más del 17 por ciento del producto interno bruto (PIB), además de financiar cientos de miles de hogares y ser la clave en el tipo de cambio del lempira en relación al dólar estadounidense.

 

CAFTA

importacionOtra grave amenaza a la economía nacional en caso de un triunfo de Trump y que cumpla con sus propuestas electorales, es la renegociación de los acuerdos comerciales de libre comercio.

Al igual que en el tema de las remesas y el muro, el aspirante republicano se refiere al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA, por sus siglas en inglés o TLCN en español), el suscrito con los países centroamericanos y República Dominicana, conocido en inglés como DR-CAFTA, como uno de los objetivos a revisar y combatir, hasta transformarlo en algo positivo para la economía estadounidense.

 

La industria de la maquila, que genera 135 mil empleos directos y más de mil millones de dólares en valor agregado, es gran dependiente del acuerdo comercial CAFTA y cualquier revisión pondría en peligro su competitividad y con ello los empleos que genera.

Una perturbación en dicho sector sería perjudicial para la estabilidad económica y social del país, ya que decenas de miles de familias dependen de dicha industria.

Igualmente, el futuro del programa presidencial Honduras 20/20, que busca generar 600 mil empleos en cinco años, depende mucho de la industria de la maquila, así como textil,  para el éxito del mismo.

spot_img
spot_img

Noticias recientes

spot_img
spot_imgspot_img