En otras oportunidades, el jerarca católico, que encabeza un movimiento que se opone a la actividad minera a cielo abierto en el occidente de Honduras ha criticado la forma en la que el presidente Zelaya conduce el país y esta vez no fue la excepción.
En medios políticos y periodísticos Santos es conocido como el “obispo rojo” por su declarada simpatía por el partido Liberal en el gobierno.
“Solo Dios puede ayudarnos en estas circunstancias porque al gobierno no le miro ninguna ruta, sino que está así como más%26nbsp; atendiendo emergencias, corriendo de un lado a otro, otorgando subsidios, pero eso no es gobernar”, apuntó.
A juicio del prelado, para gobernar hay que ver los problemas a fondo y tener un plan de gobierno definido para ir dando solución dando solución a los problemas nacionales, cosa que no tiene la administración Zelaya.
¿No se sabe a donde va el gobierno entonces?, se le preguntó: “Si no se sabe, simplemente mi impresión es que solo estamos pasando los cuatro años, pero al final va a quedar el país igual o en peores condiciones”, respondió.
En los últimos años, Santos ha encabezado una coalición de organizaciones y de las fuerzas vivas de occidente que demanda el cese de la minería a cielo abierto y de otras actividades mineras que atentan contra el medio ambiente y la salud de los pobladores de la zona.