El pasado domingo el presidente de Taiwán, Chen Shui-bian, dijo en San Salvador que China trató de sobornar a Costa Rica hasta con 400 millones de dólares para abrir relaciones bilaterales y cortarlas con Taipei.
El vicecanciller costarricense, Edgar Ugalde, afirmó que estas declaraciones «son inaceptables, irrespetuosas y alejadas de la realidad» y «constituyen, además, un intento de injerencia en decisiones soberanas de Costa Rica».
«Con esas afirmaciones se ofende también a otros países que reconocen diplomáticamente a la República Popular China y, queda claro el tratamiento que (Taiwán) dará a quienes que en el futuro decidan cambios en su política exterior», agregó Ugalde en el comunicado de la Cancillería.
El diplomático recordó que Costa Rica estableció relaciones diplomáticas con China el pasado 1 de junio y las rompió con Taiwán «por una decisión soberana, en un acto de realismo de su política exterior que promueve la ampliación de los lazos diplomáticos con Asia y con el mundo».
Taiwán es considerada por Pekín como una provincia rebelde y que mantiene una campaña para lograr el reconocimiento de la ONU, cuenta en el mundo con el apoyo de 24 países, la mayoría en Centroamérica y el Caribe.
El presidente de Taiwán finalizó hoy una visita oficial de tres días a Nicaragua, última escala de una gira de Estado por Centroamérica que incluyó a El Salvador y Honduras, y en la que asegura fortaleció sus lazos con los países de esta región.