En una breve declaración, Zelaya calificó de «histórica» la visita de Lula, quien a su vez expresó su «gran alegría» por ser el «primer presidente de Brasil en hacer una visita oficial a este país», tras un siglo de relaciones diplomáticas.
Lula subrayó que «vengo con la disposición» de realizar con Zelaya «un trabajo muy intenso para que podamos hacer en los próximos tres o cuatro años más de lo que hicimos en los 100 años de relaciones diplomáticas entre Brasil y Honduras».
«El mundo globalizado demanda de los gobernantes, de los empresarios y de los políticos más coraje, más osadía y más capacidad emprendedora», agregó, y remarcó que «vivimos en un mundo competitivo y esa competencia depende mucho del papel que el Estado nacional tenga que desempeñar».
El mandatario brasileño mantendrá una reunión privada con Zelaya en la Casa Presidencial, al final de la cual está prevista la firma de seis acuerdos de cooperación, según la agenda oficial.
Los acuerdos serán en materia de defensa, creación de un banco de leche humana en Honduras, gestión para capacitar técnicos en recursos hídricos, producción pecuaria y organización de cadenas agroalimentarias en las áreas de carne, leche, porcicultura y avicultura, de acuerdo con el canciller hondureño, Milton Jiménez.
Zelaya y Lula brindarán una rueda de prensa conjunta, luego el gobernante hondureño ofrecerá un almuerzo a su homólogo brasileño, y después ambos asistirán a un encuentro de empresarios de Honduras y Brasil.
Tras permanecer unas ocho horas en Tegucigalpa, Lula viajará hoy mismo hacia Managua para continuar la gira que comenzó el domingo en México y que también le llevará a Jamaica y Panamá.
Acompañan a Lula sus ministros de Relaciones Exteriores, Celso Amorim; de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Miguel Jorge, y de Agricultura, Reinhold Stephanes, lo mismo que un grupo de empresarios. ACAN-EFE