“Gracias a Dios que dijeron que no vienen a observar nuestras elecciones, que bueno”, dijo Custodio en relación a la posición asumida por la OEA.
“Esas tres letras nos han ofendido mucho a los hondureños”, señaló el defensor de los derechos humanos.
Cómo es posible, se preguntó, que primero nos expulsan de un foro y luego quieran venir a observar nuestras elecciones.
Agregó, que ahora, aunque la Organización de Estados Americanos quiera venir hay que decirles que no.
Según Custodio, no es extraño que los observadores de la OEA, sean los que representan a Hugo Chávez en ese organismo.
Añadió que si la OEA cambia su posición inicial y decide participar en las elecciones como observador, “Lo menos que podríamos hacer nosotros los hondureños es decirles no, muchas gracias, ya no vengan”.
Expresó que Honduras debe buscar sus propios observadores para las elecciones, sean estos nacionales o internacionales.
“Debemos buscar observadores internacionales que sean genuinos representantes de sus respectivos pueblos para que cuando regresen la gente respete sus opiniones”, declaró.
Custodio es del criterio que si los gobiernos no representan debidamente a sus pueblos, entonces la tarea para Honduras es entenderse directamente con los pueblos y no con esos gobiernos.
El 29 de noviembre unos 4.5 millones de hondureños están llamados a escoger en las urnas un nuevo presidente, tres designados presidenciales, 128 diputados titulares y 128 suplentes para el Congreso Nacional, 298 alcaldes municipales y sus respectivos regidores.







