Sin embargo, subrayó que en las elecciones del pasado año «los hondureños ejercimos el derecho de autodeterminación y mandamos un mensaje inequívoco al mundo».
«Ese es el mensaje que ha sido aceptado por la mayoría de las naciones aquí representadas y nos gustaría que fuera aceptado por todas», señaló en su intervención en la Asamblea General de la ONU al referirse a algunos países que siguen sin reconocer al Gobierno de Porfirio Lobo, que asumió el pasado enero.
Canahuati habló hoy en representación de Lobo, que solo intervino el lunes en la Cumbre de los Objetivos del Milenio (ODM) de Naciones Unidas, previa a la Asamblea General.
El canciller hondureño expresó el firme apoyo de su país al papel que debe cumplir el organismo mundial para lograr un mundo «más próspero y justo» y el compromiso de seguir trabajando para plasmar los ideales plasmados en la Carta de San Francisco.
Honduras, dijo, «tiene una vocación democrática y pacífica basada en la libre determinación de los pueblos y no injerencia en asuntos internos».
También se refirió a que erradicar la pobreza en el mundo requiere esfuerzos adicionales de respuesta colectiva. La apertura del comercio es tan importante como la Ayuda Oficial al Desarrollo, aunque no la sustituya, afirmó.
Y advirtió que «el manejo prudente de nuestras economías no es solo responsabilidad de los países en desarrollo».
