Tegucigalpa – El abogado constitucionalista Juan Carlos Barrientos criticó que la justicia hondureña no actúa de la misma forma en casos de aseguramientos de propiedades para imputados por delitos de narcotráfico, lavado de activos y fraude.
– Señaló que a procesados convalecientes se les envía a Támara, en tanto otros que gozan de buena salud guardan prisión en batallones.
“A todo el mundo le extraña que solo le aseguren bienes a los Rosenthal, a otros involucrados en temas de lavado de activos y narcotráfico y no le hacen incautaciones a Fabio Lobo, ¿por qué no le hacen incautaciones a Rafael Leonardo Callejas o a (Alfredo) Hawit? ¿Qué es lo que está pasando en este país?”, preguntó el catedrático universitario.
Asimismo, interrogó por qué imputados en iguales delitos son enviados al Primer Batallón de Infantería para cumplir prisión y otros “no tocan tablita” para ser trasladados a la Penitenciaría Nacional de Támara.
Barrientos fustigó “el ensañamiento” de la justicia con “algunos” personajes y el beneficio con otros, pese a que ambos son señalados de los mismos delitos.
“Aquí no se cumple aquel famoso dicho que reza: o todos peludos o todos pelones, de repente hay algún favoritismo de parte de la ley, y eso nos debe llamar a reflexión”, reprochó.
En otro apartado, el profesional del derecho dijo que la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP) nació muerta “es un mal parto”.
¿Debe desaparecer la DIECP ante los resultados obtenidos en cuatro años?
— Proceso Digital (@ProcesoDigital) 20 de julio de 2016
Continuó que “es una institución que no ha hecho absolutamente nada y han consumido unos 200 millones de lempiras y vemos que no hay un solo oficial de policía judicializado, tampoco se ven resultados de la depuración, tiene que cerrar esta oficina”.
Resaltó la labor de la Comisión de Depuración de la Policía Nacional, de quienes dijo: “Esta gente se está jugando su vida, la seguridad de su familia, enfrentándose con el crimen organizado, con bandas de sicarios y con toda la podredumbre que ha existido por décadas en la Policía”.