Tegucigalpa – El puerto de Trujillo, recibe su segundo barco de este año, como ya es costumbre en esta época muchos cruceristas que escapando de las gélidas temperaturas del norte optan por vacacionar en climas más cálidos, además de la preferencia que tienen buscan las cálidas temperaturas de las costas hondureñas.
Ese fue el caso del crucero Seabourn Odyssey que arribó el lunes de esta semana al puerto Banana Coast, de la ciudad de Trujillo, trayendo alrededor de ochocientos pasajeros, que venían procedente de Belice.
Los pasajeros que decidieron bajar a tierra firme, pudieron disfrutar de las bellezas naturales del puerto, así como sus playas de aguas tranquilas, su banco de estrellas, y monumentos coloniales como la Fortaleza Santa Bárbara, sin dejar atrás la gastronomía a base de coco y mariscos.
Como ya es costumbre los habitantes de Trujillo, están preparados para recibir de la mejor manera a los cruceristas, esperando se lleven la mejor impresión no solo de las bellezas naturales de la zona sino también de la amabilidad y calidad de servicio que ofrecen sus habitantes, que les ha valido las más altas calificaciones de satisfacción dentro de las compañías de crucero.
La llegada de cruceristas es muy importante para la economía de la ciudad y el turismo en general ya que cada persona que baja del barco gasta un promedio de 90 dólares en compra de souvenirs, transporte interno, actividades recreativas, bares y restaurantes, durante las aproximadamente siete horas que el barco permanece en el puerto.