«Los ataques a periodistas es un fenómeno que ha ido en aumento. En lo que va de año, ya han fallecido 130 periodistas, la mayoría en Irak, mientras que otros son objeto de constantes amenazas», dijo Schmidt en rueda de prensa, en el marco del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Schmidt consideró que «ese fenómeno, no es exclusivo de los países en situaciones de guerra, puesto que hay países donde reina la paz y la democracia, y, sin embargo, los profesionales de la prensa son asesinados por revelar casos de corrupción o criminalidad que involucran a las autoridades».
El funcionario citó el caso de algunos países de América Latina, como Colombia, o Rusia y Bangladesh, donde los periodistas corren el riesgo de perder la vida, o sus familiares son objeto de amenazas, incluida la de secuestro.
No obstante, estimó que si bien es cierto que hay muchos trabajadores del sector que viven bajo el miedo de ir a áreas conflictivas, son muchos más lo que se arriesgan para dar a las agencias la información en directo.
«Ello es un reflejo del espíritu del sector, y el caso de Irak es una demostración de la importancia de proteger a los periodistas», según Schmidt.
Asimismo, señaló que la UNESCO está empeñada en garantizar no sólo la libertad de expresión, sino el respeto a la vida de aquellos periodistas que realizan su trabajo en condiciones de crisis.
A ese respecto, explicó que la entidad está trabajando en tres direcciones fundamentales: en el ámbito institucional con todas las organizaciones del sistema de la ONU, en el ámbito legal con los estados miembros, y con los propios profesionales de los medios de comunicación.