Tegucigalpa – Pese a que la depresión Sara abandonó el territorio nacional el pasado sábado, este miércoles aún varias comunidades en diferentes sectores permanecen anegadas.
En el sur de Honduras decenas de comunidades todavía mantienen niveles altos de agua, lo que las mantiene incomunicadas.
Entre tanto, la aldea El Cerrito del municipio de Baracoa, Cortés, retrata el devastador paso de Sara al permanecer todavía anegada.
Todos los residentes de las colonias, aldeas y caseríos inundados han alertado que después que el agua baje deben regresar y afrontar un foco de contaminación.
“No podemos estar en el albergue muchos días”, expuso un hondureño que tuvo que abandonar su casa porque su comunidad se inundó en el departamento de Cortés.
Sin embargo, al regresar a su hogar quedará expuesto a una serie de enfermedades a causa de los cúmulos de basura y bacterias acumuladas.
Esa es la realidad de miles de hondureños tras el paso de Sara que ingresó el jueves al territorio nacional el jueves por la noche y abandonó el país el sábado. (RO)