La Policía Nacional también es una institución que tiende puentes humanos, a través de una de sus estructuras transversales.
Además, es la estructura fundamental que actúa en la prevención del delito.
Se trata de la Policía Comunitaria, que es parte de una estructura organizacional de la Policía Nacional encargada de hacer y fomentar actividades que fomenten el acercamiento con la población.
Asimismo, se encarga de ofrecer servicios policiales prestados dentro de las comunidades, haciendo e impulsando la relación policía- comunidad, esto da la oportunidad de interactuar con la población, escolares, adolescentes y personas mayores.
A través de esos contactos, los integrantes de esta unidad especial interactúan con la gente, ofrecen servicios y desarrollan un clima de confianza.
Mediante las actividades, la policía vuelve a la comunidad (desde las colonias más seguras, hasta los barrios más calientes), en ámbito social, lidera procesos de seguridad, prevención y desarrollo.
Como eje transversal, es la aplicación de la filosofía de policía comunitaria y los Derechos Humanos.
Se encarga de promover y capacitar a los y las policías, en todos los niveles jerárquicos y las especialidades de servicio de la institución.
Brinda, espacios de participación multisectorial en las comunidades, con el fin de atender directamente los problemas de las comunidades dentro de aspectos sociales, legales y de inclusión de las personas, integrando a jóvenes en los problemas diarios, buscando soluciones integradas para generar acciones de recuperación de espacios públicos, charlas en las escuelas, colegios, maestros, padres de familia, patronatos y todas las fuerzas vivas de las comunidades