Estuvieron presentes en la inauguración, el presidente Porfirio Lobo Sosa y los ex mandatarios Rafael Leonardo Callejas y Ricardo Maduro, además de la presidenta de la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), Aline Flores y la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos.
El proyecto valorado en 70 millones de lempiras, es considerado el paso a desnivel más grande Honduras, le generará al Estado un ahorro de 100 millones de lempiras al año en combustible, beneficiando a más de 60 mil conductores que a diario transitan por la zona.
“Paz y Esperanza”
En su discurso, el alcalde de la ciudad recordó que hace un año prometió la construcción de tan monumental obra “hoy es una realidad para beneficiar a los miles de capitalinos que transitan por el sector, ahora puedo decir misión cumplida, porque nos propusimos generar empleo y ahorrar tiempo y combustible”.
Manifestó que el paso a desnivel se llama “Paz y Esperanza” porque a través de las redes sociales en internet se le pregunto a la ciudadanía cómo bautizarlo, a lo que la mayoría expresaba esos nombres y fue así que se hizo la combinación porque el pueblo quiere vivir en paz y con la esperanza que todo mejorará.
Refirió que si se quiere vivir en paz, hay que hacer justicia “que se ahorre dinero al pasar por aquí es justicia, que cada capitalino sepa que sus impuestos fueron usados correctamente es hacer justicia, lo justo es cambiar lo que se tenga que cambiar, y esta obra es un símbolo que sí se puede cambiar y es un destello de esperanza que cuando se quiere se puede y todo se puede lograr juntos”.
“Es hora de tender puentes y no levantar muros, porque Honduras somos todos, somos de un país donde nadie sobra, nadie tiene más y nadie puede sentirse ajeno, podemos unirnos para construir el país que todos soñamos y tener la vida que todos soñamos para nuestra familia”, agregó.
Esto es un ejemplo claro que cuando se quiere se puede, resaltó el funcionario, quien aprovechó la oportunidad para agradecerle a todo el pueblo capitalino y a la empresa privada, porque gracias al pago de sus impuestos, el paso a desnivel se convirtió en una realidad.
Ricardo Álvarez agradeció también a la Corporación Financiera Internacional (IFC), porque contribuyó con un préstamo de 835 millones de lempiras que en 2010 adquirió la Alcaldía con la banca privada local para el mejoramiento de la infraestructura vial de la ciudad, monto que fue avalado por organismo que forma parte del Banco Mundial.
Esta obra quedará en la historia
Entre tanto, el presidente Porfirio Lobo Sosa, expresó que el nombre escogido para el paso a desnivel aglutina el deseo del pueblo de vivir en paz y con la esperanza de una Honduras mejor. “Esta es una obra que quedará en la historia de Tegucigalpa y del país, y me gusta su nombre”.
Refirió que Honduras tiene muchos problemas, pero jamás se debe perder la esperanza para salir adelante, “Tegucigalpa va a mejorar igual sucederá para Honduras, sólo se necesita de la unión de todos los hondureños para progresar”.
“Líder Álvarez lo felicito, me siento contento por esta gran obra que lleva el nombre de lo que Honduras necesita, la paz que se fundamenta en la justicia social y la esperanza que es la voluntad de un pueblo de creer en si mismo con capacidad de hacer y crear un mejor país”, puntualizó.
Reconocimiento a una efectiva gestión
La Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa (CCIT), Aline Flores, exteriorizó su satisfacción de contar con este puente a desnivel que viene a modernizar a la capital de Honduras.
“Quiero felicitar al alcalde y su corporación, porque este es un ejemplo que cuando queremos podemos trabajar en equipo y lograr cosas importantes para tener una capital del primer mundo, esta obra nos está diciendo que hay un gran compromiso, entonces hay que seguir adelante y para ello cuenten con el apoyo de la empresa privada.
El alcalde de la ciudad recibió un reconocimiento de parte de la Asociación de Transportistas de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, cuyo presidente Jorge Andino, manifestó que esta obra permanecerá en el corazón y el pensamiento de los capitalinos.
Las obras que ha realizado Ricardo Álvarez durante su gestión están a la vista de todos, tales como el paso 12 de la UNAH, el Puente Estocolmo, el paso a desnivel a inmediaciones del Estadio Nacional, la ampliación del tercer carril en el bulevar Fuerzas Armadas y este imponente proyecto, enumeró el empresario.
El sector transporte se siente beneficiado por estas obras, el ahorro de tiempo y dinero es para toda la ciudadanía, lo cual son suficientes elementos para decirle: “Señor alcalde el sector transporte se siente comprometido a seguirlo apoyando en sus próximas luchas, porque sabemos que tiene otras obras proyectadas y estamos seguros que cumplirá con ellas”.
“Estas son las obras que deben ejecutar nuestras autoridades para devolverle la credibilidad y la confianza al pueblo hondureño”, concluyó Andino.
Características de la obra
La obra, calificada por expertos como la mejor de Honduras, posee tres niveles de intercambio vehicular, caracterizado por un túnel reforzado por un muro anclado y una caja puente de concreto hidráulico que permite el tránsito vehicular desde el bulevar La Hacienda con giro a la izquierda hacia el bulevar Suyapa, en sentido norte-este.
Sobre el túnel por donde pasan los automotores que de La Hacienda se dirigen a la colonia Florencia, se eleva imponente el puente aéreo que sin interrupciones da paso a los carros que del bulevar Suyapa corren hacia el Estadio Nacional o de sentido este-oeste.
Para una mejor circulación, la infraestructura posee un paso a desnivel con giro a la izquierda del bulevar Suyapa al bulevar La Hacienda, con orientación oeste-norte; y se construyen obras complementarias con carriles de giro, aceleración y desaceleración en las cuatro direcciones, así como la debida señalización horizontal y vertical para orientación de los conductores.
Este innovador paso a desnivel posee varias obras complementarias como carriles de giro a la izquierda para conectar el bulevar Suyapa con el bulevar La Hacienda, que lleva a zonas comerciales de alta afluencia de personas.
Esta obra, además de modernizar la ciudad y contribuir a disminuir el tráfico vehicular en esta transitada zona, le traerá al Estado hondureño un ahorro de al menos 100 millones de lempiras en combustible al año, porque según estimaciones cada uno de los motoristas que utiliza el paso a desnivel tiene un ahorro anual de entre cinco mil y siete mil lempiras por este mismo concepto, sumado a que se reducirá la contaminación y el estrés que producen las largas filas de automóviles.
Debido a su magnitud sin precedentes y para garantizar su durabilidad, esta importante obra recibirá el mantenimiento requerido por el paso de los años y así la población capitalina cuente con un paso a desnivel de larga duración que solvente los problemas viales a largo plazo.