spot_img

Reino Unido se zambulle en el desconfinamiento ante el colapso de la economía

Londres – Con la reapertura de piscinas y gimnasios, el Reino Unido emprende este sábado la recta final de su desconfinamiento presionado por la inminente recesión económica, si bien el país se mantiene como primero de Europa y tercero del mundo más castigado por la pandemia.

Tras el reciente regreso a la actividad de comercios variados, peluquerías, «pubs» y restaurantes -aunque muchos siguen cerrados al considerar su reapertura inviable-, hoy toca el turno a los espacios deportivos cubiertos, clausurados desde el inicio del confinamiento el pasado 23 de marzo.

Sin embargo, la directora de la asociación Swim Englad, Jane Nickerson, que promueve la natación, alertó de que solo un 20 % de las piscinas de Inglaterra -la región más poblada, con casi 56 de 66.6 millones de habitantes- podrán reabrir al público, pues la mayoría carece de los recursos para operar con las necesarias medidas de seguridad.

Como han hecho otros sectores, Nickerson pidió asistencia financiera al Gobierno, después de que el primer ministro, Boris Johnson, anunciara el viernes que en breve presentará una campaña pública para combatir la obesidad, al concluir un estudio que las personas con sobrepeso tienen más riesgo de complicaciones y de morir si contraen la COVID-19.

Aunque Johnson, que adelgazó tras ser ingresado por el coronavirus en abril, fue en el pasado reacio a ejercer de «Estado niñera» y decir a los ciudadanos «lo que deben hacer», finalmente ha aceptado que perder peso «es una de las maneras de reducir los factores de riesgo personales», dijo ayer.

En parte por sus frecuentes cambios de opinión, la oposición laborista ha acusado al Ejecutivo de mala gestión de la pandemia y le achaca lentitud en la respuesta inicial, falta de equipamiento en el sector sanitario, fallos en el sistema de detección y rastreo y caos en la reapertura de las escuelas.

El líder conservador admitió el viernes en una entrevista con la BBC que su Gobierno «no entendió» la naturaleza del virus durante «semanas o meses», lo que pudo llevar a cometer errores en la estrategia, si bien descartó haber sido lento en ordenar el confinamiento.

Tras cumplir ayer, 24 de julio, un año en el poder, Johnson, que ganó por mayoría absoluta las elecciones del pasado 12 de diciembre, sigue bajo presión para mitigar la recesión que se avecina, con una contracción del producto interior bruto (PIB) prevista este año de más del 14 %.

Con las necesidades económicas se combinan las dificultades para controlar el virus -que trata de combatirse ahora con confinamientos selectivos y rastreo de contagios-, que ha causado ya más de 45,600 muertes confirmadas por test en el Reino Unido, si bien se calcula que el número real supera las 56,100.

En base al plan de desescalada del Gobierno, el 1 de agosto podrán reabrir en Inglaterra boleras, casinos y pistas de patinaje, según indicó el primer ministro al anunciar el pasado 17 de julio el calendario de levantamiento de restricciones, que es diferente en los territorios de Escocia, Gales e Irlanda del Norte.

En la misma fecha, podrán regresar los teatros y salas de conciertos que puedan establecer las medidas de seguridad que se requieren y se permitirán las bodas con un máximo de 30 invitados, mientras que en septiembre está previsto el retorno pleno de las escuelas y las guarderías.

A partir de octubre, la intención es volver a celebrar actos en estadios y retomar las conferencias empresariales, previos periodos de prueba, sin que de momento haya fecha fijada para el regreso de las discotecas y clubs nocturnos.

spot_img
spot_img
spot_img

Noticias recientes

spot_img
spot_img