Tegucigalpa- Las represas de la zona central han disminuido su nivel hasta llegar a apenas un 35 por ciento de su capacidad, lo que provoca que los racionamientos de agua sean más agudos, informaron las autoridades del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Sanaa).
El gerente de la división metropolitana del Sanaa, Carlos Hernández, informó que el verano es crítico y cada día las temperaturas son más altas, en ese sentido, los racionamientos de agua son hasta cada seis días.
Agregó que a inicios de marzo se realizaban cada cuatro días, principalmente en las zonas abastecidas por la fuente de El Picacho cuyos niveles han disminuido dramáticamente.
«En el caso particular de El Picacho, su producción se ha caído de alrededor de mil litros por segundo a 485 litros por segundo, lo que ha influido para que el vital líquido sea suministrado cada seis días», reiteró.
Señaló que en algunos sectores principalmente los que reciben agua de la represa Los Laureles los racionamientos son de tres a cuatro días desde este mes, pero en abril y mayo se incrementarán los días.
“No tenemos la capacidad para atender a toda la población, no nos damos abasto y es por ello de que se envían pipas de agua para cubrir las zonas altas de la ciudad”, argumentó.
Los meteorólogos han advertido que, en 2019, la canícula será más prolongada de lo que se había pronosticado, y el regimen de lluvias tendrá una reducción muy semejante a la experimentada en períodos pasados.
Está previsto que en abril se presenten algunas lluvias como parte de un falso invierno, producto de las altas temperaturas. Adicionalmente, las precipitaciones esperadas a partir de mayo tendrán un retraso de varios días, advirtieron los especialistas.
