Por Alberto García Marrder
Para Proceso Digital, La tribuna y El País de Honduras
La prensa mundial está disfrutando el guantazo que le pegó en la cara al presidente de Francia, Emmanuel Macron, su esposa Brigitte Trogneus, 25 años mayor que él.
Pero yo quisiera enfocar la situación de Francia en un tema más serio: la peligrosa islamización de ese país ya el más musulmán de Europa, especialmente de argelinos y marroquíes.
El incidente de Macron y su esposa ocurrió cuando llegaron a Hanói (Vietnam) en una gira oficial por el sudeste asiático. Cuando se abrió la puerta del avión Airbus francés, se ve claramente como la mano de la antigua profesora de Macron (en un guante rojo), le da un “guantazo” en la cara al presidente. Él aclaró después que estaban bromeando.” ¿Bromeando a guantazos?
Lo de Brigitte Trogneus y Emmanuel Macron es una historia de amor fascinante, muy a la francesa. A los 15 años de edad en Amiens, él se enamoró de su profesora de literatura, a pesar de estar ella ya casada y madre de tres hijos. Alarmados los padres de él, lo enviaron a París a seguir sus estudios. Antes de irse, le prometió a su profesora que regresaría para casarse con ella. Y así lo hizo, cuando ya era ministro de Economía.

Ahora ella es más popular en Francia que él y dirige la carrera política de su marido. Y él ha adoptado como “sus nietos” a los tres hijos (ya mayores) de ella.
Sobre el Islam, vaya por delante mi creencia que su religión es libre de profesarse, pero no a cambio de la desaparición de otras. Y es una incongruencia que en un país musulmán, no se puede ejercer el catolicismo, por ejemplo.
Lo frecuente ahora es ver en Los Campos Elíseos a mujeres musulmanas o francesas con una burka islámica, siempre detrás de su marido o aparejado. Y como existe una alta tasa de natalidad entre los musulmanes y baja francesa, es fácil pronosticar que en menos de dos años, serán diez millones en vez de los ocho millones actuales. !!Para temblar!!!
Y nerviosos observando lo que pasa en Francia, Gran Bretaña con su alarmante inmigración de la India y Pakistán, y Alemania con los de Ucrania y Turquía.
Si la tendencia no cambia, se pronostica que para el año 2050, los musulmanes serán mayoría antes que los cristianos. Y su influencia en las votaciones presidenciales y regionales, será decisiva.

En 2012, dieron su voto al socialista Francois Holland, contra la derecha de Nicolas Sarkozy. Y en 2013 y 2014, apoyaron las derechas contra las izquierdas en las municipales. En 2017, favorecieron a Emmanuel Macron y a las derechas contra Marine Le Pen. Y en el 2022, volvió a apoyar Macron contra Le Pen.
Pero el interés de Los Hermanos Musulmanes es sobre todo ganar poder e influencia a nivel municipal. Y lo están consiguiendo, poco a poco.
¿Macron, quien tiene muchos problemas internos, podrá frenar la expansión –casi agobiante- de los musulmanes en Francia? Lo dudo, ya es muy tarde.