Tegucigalpa – La presidenta de la República, Xiomara Castro, ordenó este jueves que, en cumplimiento de la Constitución y la Ley Electoral, las Fuerzas Armadas de Honduras queden a disposición del Consejo Nacional Electoral (CNE) a partir de esta fecha, pero además, les asigna una función que la ley no le atribuye al cuerpo armado: “el aseguramiento de la transmisión y resguardo de las actas de resultados”.
Esto último a tono con la misma exigencia plasmada por el jefe militar Roosevelt Hernández, ante el pleno del CNE y mediante un nota enviada a través del enlace militar del organismo electoral con la institución castrense.
Esa atribución inédita e inconstitucional, ha sido rechazada por la presidenta del CNE y por diversos sectores académicos y civiles porque desnaturaliza la función militar en el espectro democrático.
La disposición de que las FFAA pasen al CNE, tiene como objetivo garantizar la seguridad, vigilancia, custodia y transporte del material electoral, antes, durante y después de las elecciones generales programadas para el domingo 30 de noviembre.
En un mensaje en su cuenta de X, la mandataria informó que las Fuerzas Armadas fueron notificadas sobre la existencia de audios revelados por el Ministerio Público, los cuales evidenciarían una presunta conspiración criminal orientada a manipular el transporte del material electoral, interferir en la transmisión de resultados y alterar la voluntad popular.
Todo tras conocerse unos audios que proporcionó el consejero Marlon Ochoa, afín al gobernante partido Libre.
“Que lo sepan todos: ningún acto dirigido a sabotear la transparencia electoral, violar la soberanía del pueblo o alterar la paz democrática será tolerado”, amenazó la presidenta Castro en su mensaje.
La orden presidencial fue emitida bajo la instrucción de “Comuníquese y cúmplase”, dejando en manos del CNE y las Fuerzas Armadas la responsabilidad de velar por la integridad del proceso electoral hasta la declaratoria final de resultados. (PD).




 
 





