Tegucigalpa (Especial Proceso Digital /Por Lilian Bonilla) – Los temidos apagones, están a la orden del día en el país, los factores son muchos entre los principales, mala planificación, déficit de producción de energía, falta de inversión en transmisión y distribución, anotan los técnicos, pero hay algo más que asoma en la oscuridad los fantasmas de las compras directas.
– Interrupciones en el suministro de energía, disminuye la productividad y aumenta los costos operativos.
– Déficit de energía eléctrica también ha desalentado la inversión.
– Olancho golpeado con la inoperatividad de Patuca III. Allí los cortes son hasta de 36 horas.
En las últimas semanas los denominados cortes de energía que la ENEE, ya no puede disfrazar como mantenimiento, se han agudizado a tal grado de causar alarma sobre todo en los sectores productivos que reportan millonarias pérdidas diarias.
Según cálculos aproximados que hacen los expertos de forma preliminar se estima que las pérdidas diarias pueden andar entre los 11 a 25 millones de lempiras, es decir que al mes llegaría a los 750 millones de pérdidas.
(LEER) Déficit de energía frena economía e impacta en la inversión, insiste CCIC
El miércoles se anunció, por parte del gobierno, la conformación de una “Comisión Técnica Interinstitucional” para enfrentar la situación de la crisis energética en Honduras.
La comisión está conformada por la ENEE, Secretaría de Energía, Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE), Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Cámara de Comercio e Industria de Cortés (CCIC), la Asociación Nacional de Industriales (Andi), Asociación de Hondureña de Productores de Energía Eléctrica (AHPEE) y la Asociación Hondureña de Energía Renovable (AHER).
Se “apaga” la actividad económica
Los apagones se están dando en todo el territorio nacional, y aunque la afectación es general para la población, hay zonas y sectores productivos con mayores pérdidas y es el caso del productivo Valle de Sula, donde se concentra la mayor parte de la industria nacional.
El departamento de Cortés consume el 50 % de la producción eléctrica total y es en este territorio donde se produce más de la mitad del Producto Interno Bruto del país.
El Valle de Sula enfrenta serios problemas de generación de energía, transmisión en muchas zonas, donde se quieren hacer proyectos y no se puede porque no hay energía, dijo el presidente regional de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI), para la zona Noroccidental, Fuad Handal.
Esta versión concuerda con la del presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), Eduardo Facussé, quien sostiene que “la falta de disponibilidad de energía eléctrica está destruyendo la capacidad productiva del Valle de Sula, el motor económico de Honduras”.
Corredor industrial de Choloma y La Lima
con apagones hasta de 12 horas
Choloma, Cortés, algunos la llaman la ciudad de las maquilas, es un corredor altamente industrial y comercial, y en la actualidad tiene una afectación directa por los prolongados apagones de energía eléctrica.
La directora ejecutiva de Cámara de Comercio e Industrias de Choloma, Alejandra Mejía, en entrevista con Proceso Digital, confió que la suspensión del servicio de energía eléctrica en el Valle de Sula y particularmente en Choloma, que es un corredor industrial y comercial tan importante, la situación se está volviendo insostenible y crece la preocupación local.
Mejía refirió que en las últimas semanas la situación de los apagones se ha agudizado a tal grado que tienen suspensiones de energía casi a diario y se prolongan entre las 8 a 10 horas y en ciertas ocasiones más.
Los comerciantes locales, sobre todos de las Mipymes, ya están desesperados “hemos tenido reuniones y nos han planteado que vienen en una ruta de reactivación luego de la afectación por los huracanes y la pandemia por COVID-19, y ahora los apagones y dicen que hay quincenas que no logran cubrir los costos operativos, porque se para la producción”.
Hay que recordar que Choloma tiene un corredor industrial muy importante que está siendo afectado, pero adicionalmente tenemos un tejido de más de 8 mil empresas mipymes en todos los sectores agroindustriales y de comercio, y están reportando pérdidas hasta de un 40 %.
“Todos estamos sumamente preocupados por este flagelo de interrupciones de servicio de energía, esto ya se salió de control, esto es una afectación directa tanto a la parte industrial, comercial y residencial”, agregó.
Es urgente que se atienda el déficit de energía porque “estamos perdiendo empresas y empleos deberíamos de ser muy honestos, sobre qué es lo que está pasando y que haya una programación porque claramente esto ya no se trata de mantenimientos” puntualizó.
La Lima queda desolada los días que quitan la energía
Por su parte, el secretario de la Cámara de Comercio e Industria de La Lima, Enrique Contreras, confirmó que uno de los principales problemas que tiene actualmente esa ciudad es el deterioro en el sector comercial por los recurrentes cortes de energía eléctrica.
La situación para el comercio en La Lima es asfixiante porque son pocos los que tienen un generador de energía, “pero el costo de tener un generador encendido durante un día puede ser equivalente a un 15 % de la factura del mes”, indicó el ejecutivo de la CCI-Lima, a PD.
No obstante, dijo que además el tener un generador no garantiza las ventas porque cuando quitan la energía todo un día los pobladores de La Lima se van del municipio porque no quieren estar sin servicios como internet, “todo se paraliza” y particularmente si es fin de semana, lo que es grave porque es cuando se vende el 60 % de las ventas totales.
“Los apagones se han duplicado, antes teníamos cortes de 3 a 4 horas ahora tenemos cortes de días completos”, agregó.
Y lo más preocupante es que se ha advertido que los apagones pueden extenderse hasta el 2024 por el déficit de energía eléctrica.
El dirigente de la Asociación Nacional de la Micro, Pequeña Industria de Honduras (Anmpih), Efraín Rodríguez, dijo a Proceso Digital, la situación de los apagones está afectando terriblemente la Mipymes, se paraliza el comercio, se retrasa la producción y está dañando la economía familiar, hay empleados que trabajan por comisión y al reducir sus horas de trabajo, nos dicen que su pago a la quincena se ha reducido.
Asimismo, se queda mal con las entregas ya que al no haber energía todo se paraliza, además los bajones dañan los electrodomésticos y la maquinaria, apuntó.
Las Mipymes están deterioradas porque vienen en recuperación y a otros problemas se suman los apagones, se estima que se pierden en el sector unos 10 millones diarios, agregó, al tiempo que abogó para que haya una mejor planificación y acción en el sector eléctrico, porque también afecta mucho la inversión.
Lo advertimos
Lo dijimos, lo expusimos, lo señalamos, lo advertimos y hasta lo denunciamos, son frases que se escuchan con frecuencia por parte de los especialistas en el tema energético, cuando recuerdan haber hecho la advertencia de que había déficit de energía y que debía prevenirse, máxime con los pronósticos de sequía, no obstante, se quejan de que más bien fueron atacados y acusados.
Sin embargo, los especialistas en el tema y empresarios reconocen que el tema energético no es nada nuevo y por el contrario es algo recurrente, y se ha dicho hasta el cansancio que la ENEE, se ha convertido en un barril sin fondo drenando las arcas del Estado.
De acuerdo con el informe «Estado de país 2023: la realidad del subsector eléctrico en Honduras», presentado por la ASJ, en 2022, comparado con 2021, el racionamiento de energía aumentó en 15 % y en promedio hubo 24 apagones diarios.
El mismo informe describió que comparado con 2021 el número de apagones en 2022 aumentó de 8,561 a 8,859.
Lo más lamentable es que según cálculos de expertos estos datos se pueden incrementar de manera drástica este año y los subsiguientes si no se toman las medidas ya que el déficit seguirá en incremento. En la actualidad la ENEE, reconoció un déficit de 180 MW.
No es desconocido que, en las últimas décadas, Honduras se ha enfrentado a una serie de desafíos relacionados con la disponibilidad y la calidad del suministro de energía eléctrica, y con el déficit vienen los apagones frecuentes y prolongados, que tienen un fuerte impacto en la economía de los diversos sectores productivos.
Hoy día es frecuente escuchar las quejas de los empresarios ya sean grandes, medianos o pequeños por las interrupciones en el suministro de energía que dificultan las operaciones diarias de las empresas, lo que resulta en una disminución de la productividad y un aumento de los costos operativos.
La falta de energía eléctrica también ha desalentado la inversión extranjera, ya que las empresas consideran que el ambiente de negocios es inestable.
Los técnicos concluyen que, si bien es cierto que las nuevas autoridades heredaron una situación difícil, no es excusa para que sigan por la misma ruta, sin planificación e inversión para un sector que es vital para el desarrollo del país. LB