El líder del BJP en Uttar Kalraj Mishra y el ex diputado B.K. Gupta también han sido denunciados por violar las restricciones impuestas ayer para evitar incidentes violentos en el municipio de Pilibhit, donde tuvieron lugar los disturbios, en los que al menos cinco personas resultaron heridas, agregaron las fuentes.
La denuncia contra Varun fue interpuesta por el responsable de la prisión de Pilibhit, Mukesh Arora, después de que militantes del BJP lanzaran piedras y rodearan las dependencias carcelarias, según la agencia PTI.
Gandhi se presentó ayer voluntariamente en la corte de Pilibhit, donde fue puesto bajo custodia judicial hasta el lunes por las proclamas antimusulmanas que había proferido durante un mitin electoral.
«Si alguien levanta una mano contra los hindúes o piensa que son débiles, que no tienen a nadie que los apoye, juro por (el texto sagrado) Bhagavad Gita que le cortaré esa mano», dijo un exaltado Varun, que se refirió a los musulmanes con el término «katwa», una forma despectiva de decir «circuncidado» en hindi.
«Los hindúes que se queden en este lado. Enviad al resto a Pakistán. Ésta es la mano del Loto (el símbolo de su partido), cortará sus cuellos tras las elecciones», continuó el nieto de la ex primera ministra india.
Tras el polémico discurso de Gandhi, la Comisión Electoral instó al BJP a que retirara su candidatura, algo a lo que el partido conservador se negó.
Poco después de conocerse la denuncia, el líder del BJP, L.K. Advani, se refirió brevemente al caso de Gandhi en una rueda de prensa en la que aseguró que se trataba de la primera vez que el organismo electoral pedía a un partido la retirada de un candidato.
La madre de Varun, Maneka, también miembro del BJP, dijo hoy que la prensa está «linchando» a su hijo por decir algo que en realidad todos saben «que es cierto», en declaraciones al canal delhí NDTV.
