spot_img

México sepulta la reconciliación con Ecuador al dudar de la reelección de Daniel Noboa

Ciudad de México – La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, sepultó este miércoles la reanudación de relaciones con Ecuador al considerar «dudosa» la reelección del mandatario ecuatoriano, Daniel Noboa, un roce que ocurre mientras México busca proyectar liderazgo regional.

Sheinbaum aseguró que, tras la ruptura diplomática en abril de 2024, México no tendrá «relaciones con Ecuador mientras Noboa ejerza el cargo de presidente», además de citar un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA), que «dice que sí ganó Noboa, pero no fue justa la contienda» del domingo pasado.

«No se van a reanudar las relaciones y, además, fue muy dudoso su triunfo, en particular reconocido por la propia OEA, ya ni siquiera es otro organismo internacional», expuso la gobernante mexicana en su conferencia matutina.

Sheinbaum resaltó que el presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó este martes que no puede reconocer los comicios en los que Noboa ganó la reelección para 2025-2029, una postura similar a la de Venezuela, pero que contrasta con otros Gobiernos de izquierda, como Brasil, Chile y Honduras.

La mandataria, quien en febrero expresó su deseo de que Ecuador tuviera una «presidenta con a» para reanudar las relaciones con México, apuntó que «la otra candidata», la correísta Luisa González, «está diciendo que hubo un fraude», aunque Noboa tuvo el 55,6 % de los votos y ella el 44,4 %.

Un momento «delicado» en las relaciones

Las declaraciones de Sheinbaum «se enmarcan en un contexto diplomático particularmente delicado», expresó a EFE el profesor José Joel Peña de relaciones internacionales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El académico recordó que el entonces presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), rompió relaciones con Ecuador tras el asalto de la Policía ecuatoriana a la Embajada mexicana en Quito, el 5 de abril de 2024, para detener a Jorge Glas, exvicepresidente de Ecuador (2013-2018), acusado de corrupción.

«La declaración de la presidenta puede interpretarse como una toma de posición que, obviamente, hace mucho más tensa la relación. Incluso, podría llegarse a cuestionar si el Gobierno mexicano realmente se apega a los principios constitucionales de la política exterior, en particular el de no intervención», expuso.

México acusó a Ecuador ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de violar su soberanía al invadir la Embajada, mientras que el Gobierno ecuatoriano demandó al mexicano por asilar a Glas, preso por acusaciones de corrupción.

Los roces han continuado con Sheinbuam en el Gobierno, pues Noboa anunció aranceles del 27 % a los productos mexicanos en febrero, en línea con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pero ella minimizó la medida al argumentar que México solo importa el 0,4 % de Ecuador y bromear que los camarones mexicanos «son más ricos».

«Este tipo de declaraciones podrían dificultar la eventual reanudación del diálogo con Ecuador, en un momento en el que también existen afectaciones económicas derivadas de aranceles y restricciones comerciales impuestas por Estados Unidos», explicó Peña.

Los señalamientos de Sheinbaum también plantean «interrogantes sobre la coherencia de la política exterior mexicana en el ámbito regional», en el que la mandataria ha convocado a una Cumbre por el Bienestar Económico de América Latina ante el proteccionismo de Estados Unidos.

«Desde una perspectiva latinoamericana, este tipo de declaraciones pueden percibirse como selectivas o inconsistentes si no se aplican con el mismo criterio en casos similares, esto puede afectar la capacidad de México para ejercer un liderazgo regional constructivo», advirtió Peña.

La oposición mexicana se divide

Los partidos opositores en México se dividen entre respaldar a Sheinbaum por los agravios que perciben de Ecuador y criticarla porque ella reconoció la reelección de Nicolás Maduro en Venezuela el año pasado.

«Aunque sus palabras suenan fuertes, no olvidemos que Ecuador violó la soberanía mexicana. Defender la dignidad nacional también implica tomar postura firme», expresó Vania Ávila, secretaria de Asuntos Internacionales del liberal Movimiento Ciudadano (MC), en sus redes sociales.

Mientras que América Rangel, diputada del derechista Partido Acción Nacional (PAN), resaltó que Sheinbaum no aceptó la victoria de Noboa pese a tener 11 puntos de ventaja, pero sí reconoció a Maduro «sin actas ni prueba alguna de haber ganado».

«Es claro que la izquierda no defiende la democracia, defiende delincuentes», sentenció. JS

spot_img
spot_img

Noticias recientes

spot_img
spot_imgspot_img