El diario La Prensa publicó este martes la última encuesta de la CID-Gallup en la que el gobernante hondureño muestra un nivel de evaluación a su gestión “alarmante” al caer de 45 puntos que tenía hace 18 meses a cero a la fecha que se realizó el sondeo de opinión pública.
Según la encuesta, la mayoría de ciudadanos cree que el país va por rumbo equivocado y se queja de la forma en que la administración presidencial está manejando la economía.
Otro hallazgo es que los hondureños opinan que en este Gobierno hay más corrupción que en los anteriores y la popularidad de que gozaba la figura del mandatario en los primeros meses de su gestión ha caído dramáticamente.
El sondeo reveló además que en septiembre de 2007, el 33% de los encuestados creían que Mel desempeñaba bien o muy bien sus labores al frente del Gobierno y 23% creían que lo hacía mal o muy mal.
Sin embargo, a junio del presente año, las opiniones cambiaron, ya que el 34% cree que lo hace bien o muy bien, pero el 34% piensa que lo hace mal o muy mal.
Al respecto, el mandatario dijo que “muchas veces acertamos y otras veces no acertamos” y recordó que un poco antes de las elecciones la misma encuestadora señalaba que perdía las elecciones por 10 puntos, no obstante, una semana después ganó los comicios por 15 puntos de diferencia.
“Entonces me parece que las encuestas hay que verlas desde el punto de vista objetivo, son análisis técnicos que se hacen en momento determinados”, arguyó.
Indicó que en esta última encuesta de CID-Gallup se manipuló la forma de presentarla en los medios de comunicación y citó que el empresario Jorge Canahuati, propietario de diario La Prensa, “es un adversario gratuito que tiene el gobierno”.
“Hemos estado en una lucha pidiéndole el derecho a replica, derecho a información, y cuando CID Gallup dice que el presidente de Honduras tiene una aceptación del 46 por ciento, óigame después de los ataques”, afirmó.
Zelaya recordó que ganó las elecciones luchando contra el opositor Partido Nacional, pero su gobierno no ha ganado la lucha contra los grupos de poder y particularmente los grupos de poder mediático del país.
