La quebrada La Orejona se salió de su cauce, inundando a por lo menos 30 residencias del tradicional barrio Los Jucos, a inmediaciones del barrio Morazán, en el centro de Tegucigalpa.
En la colonia Satelite, al sur de la capital, los vientos votaron árboles, los que al caer destruyeron los techos de dos viviendas.
En la misma zona, otras dos viviendas resultaron inundados.
El bombero Manolo La Guardia dijo a periodistas que las calles de varios sectores de la ciudad se inundaron, a consecuencia de la acumulación de basura en los dragantes.
Entre las colonias afectadas nombró Las Palmas, El Cortijo y la Miraflores.