Tegucigalpa – La marcha del Primero de Mayo fue tomada por dirigentes del Partido Libertad y Refundación (Libre), funcionarios de gobierno y especialmente por su coordinador Manuel Zelaya, quien fue el protagonista central y quien aprovechó los espacios mediáticos para decir que el pueblo respalda las ejecutorias de la mandataria Xiomara Castro.
– Los secretarios de las centrales obreras estuvieron ausentes de las manifestaciones de este lunes.
– El golpe de estado, la narcodictadura, el neoliberalismo y los poderes fácticos que no dejan gobernar fueron parte de los cuestionamientos de las marchas en la capital.
– Hubo grupos de trabajadores que fueron leales a sus principios y cuestionaron al gobierno, pero su protagonismo fue opacado y relegado por los colectivos que encabezaron las manifestaciones.
– Libre y funcionarios de gobierno monopolizan marcha del 1 de Mayo
Acompañado de su hijo -Héctor Manuel Zelaya- así como de funcionarios públicos y dirigentes de base y de los colectivos de Libre, la marcha se fue configurando bajo los colores rojo y negro.
El subdirector del Instituto Nacional Agrario (INA), Rafael Alegría dijo que la marcha de este día es una de las más concurridas de la historia.
(LEER) Colectivos de Libre se enfrentan en plena marcha de Día del Trabajo
Algunos de los marchantes de los colectivos aprovecharon para vandalizar las instalaciones del Comité Central del Partido Nacional (CCPN) en Comayagüela, donde rayaron paredes y escribieron consignas en las paredes del inmueble ante la vista y paciencia de efectivos de la Policía hondureña.
Otros secretarios de gobierno como Daniel Sponda, Rodolfo Pastor de María, Natalie Roque y Gerardo Torres también se hicieron presente a la marcha de este lunes en Tegucigalpa.
Diputados como Rasel Tomé y el asesor Enrique Flores Lanza fueron visibles en otros puntos de la ciudad donde auparon las demandas de los manifestantes. Igualmente, el secretario de Defensa, José Manuel Zelaya, se hizo presente y rechazó a los grupos que conspiran contra el actual gobierno.
El ministro Zelaya refirió que los radares para detectar drogas y narcovuelos funcionan en un 50 %, al tiempo que defendió los hallazgos constantes de siembras de coca que datan desde hace ocho años.
Para el caso, el alcalde del Distrito Central, Jorge Aldana, encabezaba otra de las marchas que tenía como objetivo llegar hasta el centro de la capital. El edil recriminó, lo que llamó algunas células vivas de “la narcodictadura” y dijo que sigue el proceso refundacional en el país.
Luego de recorrer varias calles de la ciudad hasta llegar a la Plaza Central, centenares de personas aguardaban la lectura del manifiesto en el estrado donde dominaba la figura del asesor presidencial Manuel Zelaya.
Igualmente, otros dirigentes obreros les daban la bienvenida a las asistencias previo a la lectura del manifiesto firmado por las centrales obreras, aunque fue notoria la ausencia de los secretarios de estos entes gremiales.
En San Pedro Sula, de igual forma los dirigentes de Libre y algunos de sus diputados fueron los que dirigieron la manifestación obrera.
Mientras en El Progreso, Yoro, aunque alineada con el gobierno, los manifestantes repelieron la figura del diputado Bartolo Fuentes al que sacaron de la manifestación.
El manifiesto
El manifiesto avalado por las centrales obreras rechaza la Ley de Empleo Parcial y los golpes de estado, al tiempo que saluda la Ley de Justicia Tributaria y la búsqueda de consensos en torno a un verdadero estado de derecho y garantías sociales.
Las consignas anti imperialistas volvieron a ocupar un espacio importante del pronunciamiento de los obreros, quienes esta vez -al menos en el documento- no fustigaron las actuaciones del gobierno de turno.
“Hemos sido un país capitalista atrasado y dependiente, hoy víctima del neoliberalismo y una narco dictadura que lo dejó lleno de conflictos, ingobernable, con una deuda impagable y una aguda crisis social y de derechos humanos: una verdadera tragedia que para superarla se necesitan muchos años de lucha y trabajo sistemático”, señalaron.
El documento reza que los críticos del gobierno señalan que los problemas del país debieron solucionarse como por arte de magia citando que “ellos consideran que con un año de gobierno es suficiente para que, por arte de magia, se hubieran pagado los veinte mil millones de dólares de la deuda pública, reparado todas las escuelas, hospitales, vías de comunicación, etc., dejadas por el régimen anterior en situación calamitosa”.
El manifiesto remarca que el neo liberalismo y la narco dictadura, ha hecho cada día más atrasado y dependiente al país, han fortalecido los poderes fácticos que son más fuertes que los poderes formales, impidiendo cualquier cambio en el estatus quo”.
Más que un pronunciamiento crítico, el manifiesto de los obreros aprovechó para defender las ejecutorias del actual gobierno.
El documento también tuvo algunas consignas en contra de un sector del periodismo nacional, a quienes señalan como “agitadores de oficio”. Asimismo, defienden que no es culpa de la presidenta Castro el alto precio de los alimentos y de los combustibles.
En coherencia absoluta con el discurso pronunciado por la presidenta Xiomara Castro, en cadena de radio y televisión, fustigaron a las empresas y la libre iniciativa. También, citan una campaña mediática que acusa al gobierno que con sus políticas populistas ahuyenta la inversión extranjera, afecta el índice de “riesgo país”, la seguridad jurídica y que se pierden miles de empleos al pretender rescatar la generación de energía eléctrica de manos de empresarios avorazados; al subsidiar el combustible, la energía eléctrica y a los pequeños agricultores; al no traer la CICIH; al pretender derogar las ZEDE; con la toma de tierra por los campesinos ya sea para cultivarlas o construir viviendas y el gobierno no los reprime; cuando se derogan leyes que favorecen al capital y no se emiten sus sustitutas como de la ley de empleo por hora.
Reconocen la pérdida de 22 mil empleos entre noviembre de 2022 a marzo de 2023, además del cierre de empresas sindicalizadas. “Algunas empresas aprovechan para despedir personal de mayor edad o con enfermedades músculo-esqueléticas. Estamos retrocediendo al cuasi esclavismo del cual se liberó la humanidad con la lucha popular, por inhumano. El temor al despido en el capitalismo y en el marco de esta crisis, es más cruel que el látigo en tiempos de la esclavitud”, remarcan.
A continuación, el manifiesto completo firmado por la Central de Trabajadores de Honduras (CTH), Central General de Trabajadores (CGT) y la Central Unitaria de Trabajadores de Honduras (CUTH). (JS)