Tegucigalpa – En un análisis profundo sobre la situación actual de Honduras, el exministro de Finanzas, Juan Ferrera, señaló que el país enfrenta graves desafíos en términos de gobernabilidad, economía y democracia.
– Honduras tiene todo para desarrollarse, pero necesita buenos liderazgos que sepan seguir el rumbo de país, dijo el empresario.
Ferrera advirtió sobre la huida de elementos fundamentales en la administración del Estado, una situación que, según él, era predecible dada la llegada de un nuevo partido político al poder con una visión política diferente.
Ferrera destacó que el actual gobierno, liderado por el Partido Libre, se autodefine como socialdemócrata, una ideología que difiere de la alineación histórica de Honduras, el país también enfrenta retos estructurales que agravan la situación. «Tenemos cerca del 70 % de pobreza y fallas estructurales en el sistema», subrayó Ferrera, quien insistió en la necesidad de un enfoque conciliador y unificado para superar estos problemas.
Lamentó que se haya dejado la línea de la Visión de País y Plan de Nación a un lado creíamos que podíamos transcurrir todos los próximos gobiernos a base de esa línea que se había trazado, sin embargo, no se hizo y estamos en una situación sumamente difícil como que no encontramos el camino por donde recorrer la situación del país, añadió.
A renglón seguido, dijo yo creo que hay suficientes capacidades de la juventud en una forma diferente de ver las cosas que solo necesitaríamos que pueda haber un legado que sea conciliador que apunte a los objetivos comunes.
Asimismo, se mostró a favor de que los subsidios sean debidamente focalizados, porque estos no son sostenibles en el tiempo y debe haber un enfoque mayor en los sectores productivos, pero tampoco se toman la regulación ni se toman en consideración los efectos de esa de esas recomendaciones, anotó.
“Al final seguimos desordenadamente administrando el país y esas situaciones se vuelven al final un cobro que pega en la economía de todos”.
Insistió en enfocarse en lo más elemental que deberíamos desarrollar como la agricultura y la ganadería y todas las actividades en las que Honduras siempre ha estado obteniendo resultados positivos y los acuerdos de comercio que se han hecho y que al final se termina en procesos en los que no se empuja fuertemente “los mercados que nos han atendido, sino que estamos en la parte política confundiendo la economía con la política y esa situación no le beneficia a ninguno de los que producimos ni el esfuerzo que los hondureños hacemos por considerar una economía de mejor capacidad”.
Respecto al Tratado de Libre Comercio con China, Ferrera advirtió que Honduras podría enfrentar un desequilibrio comercial similar al que tiene con Estados Unidos, señalando que «China tiene un superávit enorme sobre Honduras, y no va a importar de nuestro país a menos que sea en condiciones que les favorezcan a ellos, no a nosotros».
CICIH puede ayudar contra la corrupción, pero los hondureños tienen que resolver sus problemas
En cuanto a la corrupción, Ferrera fue categórico al afirmar que el país no debe depender exclusivamente de organismos internacionales como lo fue en su momento la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH) o la futura Comisión Internacional Contra la Impunidad en Honduras (CICIH) para resolver estos problemas.
«No creo que sean los de afuera los que nos van a resolver el problema. Hay cosas que podemos hacer sin intervención externa si elegimos personal calificado, honrado y comprometido con el país», dijo Ferrera.
«Es necesario que los organismos de control funcionen, como el Tribunal Superior de Cuentas, para evitar que la corrupción y la impunidad sigan debilitando la confianza en el país», expresó.
Ferrera también reflexionó sobre el impacto de las decisiones políticas en la economía, afirmando que la reelección del expresidente Juan Orlando Hernández fue un «precedente funesto» que el país todavía está pagando. Asimismo, instó a que el liderazgo actual forme un «bloque democrático» que apunte hacia un Gran Plan de Nación, destacando la importancia de la juventud en este proceso.
Finalmente, Ferrera expresó su esperanza de que los precandidatos y futuros candidatos comprendan las verdaderas necesidades del pueblo hondureño y trabajen para restaurar la confianza perdida, asegurando que el futuro gobierno debe ser legítimo y enfocado en un cambio positivo para el país. «Honduras tiene todo para ser feliz, pero necesitamos liderazgo capaz y comprometido con una visión de país que incluya a todos», concluyó Ferrera. JS
