Tegucigalpa – La esposa del general Romeo Vásquez, Lícida Zelaya, señaló este lunes la importancia de la separación de poderes en el juicio en contra de su cónyuge y de los otros dos altos oficiales de las Fuerzas Armadas.
Los tres generales en condición de Retiro fueron acusados por el Ministerio Público de homicidio y lesiones graves por la muerte de Isis Obed Murillo en las manifestaciones del golpe de Estado del 2009.
“Queremos que haya justicia, pero sabemos que el verdadero culpable está escondido detrás de sesgos políticos, esta es una oportunidad para los jueces para demostrar su honestidad”, arguyó.
Zelaya Lobo indicó que el juicio continúa y creemos en la inocencia de Romeo, sabemos que Dios iluminará al equipo de abogados defensores, queremos justicia y necesitamos que la haya para todos y no una que sea sesgada.
“Es lamentable que el presidente de un poder incite a las personas a buscar justicia por sus propias manos, necesitamos independencia de poderes y que dejen trabajar al Poder Judicial”, sostuvo.
Indicó que el caso es una oportunidad que tienen los jueces para demostrarle al pueblo hondureño que son jueces honestos y que la verdad tiene que salir a luz.
Dijo que hay presiones, pero que el juez mantuvo su equilibrio, “estamos en un régimen que quiere controlar todas las instituciones del Estado y hay que tener cuidado”, afirmó.
Aseguró que hasta el momento se desconoce quién disparó a Isis Obed Murillo, es un juicio que carece de pruebas científicas.
Reiteró que el juicio continúa y la verdad al final saldrá y que se confía que el juez sea imparcial al final del juicio. IR
