«Permitir que se mantenga este golpe sería un gran paso hacia atrás del progreso que ha hecho la región hacia la democracia en décadas recientes», agregó Vivanco.
En América Latina, la protección de los derechos humanos ha ido de la mano del fortalecimiento de la democracia, observó el activista.
«No importa cuán compleja o profunda sea la polarización política en el país, los problemas políticos deben resolverse por métodos democráticos, no por la fuerza», puntualizó Vivanco.
Otros organismos internacionales y países de la comunidad internacional condenaron la detención del presidente hondureño, Manuel Zelaya, por parte de la Fuerzas Armas y su posterior traslado a Costa Rica.
Un funcionario de alto rango del Gobierno de EE.UU. dijo a Efe que un equipo intergubernamental sigue de cerca la situación y mantiene informado al presidente Barack Obama y al Consejo de Seguridad Nacional.
La Organización de Estados Americanos sopesa una resolución de condena al golpe militar y, dependiendo de la evolución de la crisis, no descarta convocar una sesión extraordinaria de la Asamblea General para tratar el asunto.