El nutrido grupo de manifestantes pidió justicia ante la Fiscalía hondureña, al tiempo que demandaron acciones urgentes del fiscal general y su adjunto para que se les respeto el derecho que tienen de acceso a la tierra.
El campesino Santiago Gómez expresó que “venimos a denunciar a los alcaldes asesinos de nuestros municipios. Para el caso en Opalaca nos tienen amenazados y eso es grave para los que trabajamos la tierra”.
“No queremos más políticos mentirosos en la zona porque al final sólo nos ocupan como carne de cañón”, manifestó el indignado campesino, al tiempo que afirmó: “Este gobierno es una pena para Honduras”.
Otro de los manifestantes coincidió en su llamado para clamar por justicia y que les respeten sus derechos de acceso a la tierra. “Le pedimos al fiscal (Óscar Chinchilla) que no se venda y que haga algo contra el grupo de empresarios que nos mantienen amenazados y solamente llegan a explotar nuestras tierras”, aseveró.
Los manifestantes dijeron que continuarán con las protestas y que harán plantones en distintas instituciones del Estado encargadas de impartir justicia. La mayoría de los campesinos son originarios de Lempira, La Paz e Intibucá.