Nueva York.– El Departamento de Justicia de EE.UU. (DOJ) informó este viernes que no buscará la pena de muerte en los casos de los hermanos Miguel Ángel y Omar Treviño Morales, los cofundadores del sangriento cartel mexicano de «Los Zetas».
La jefa interina de la Sección de Estupefacientes y Drogas Peligrosas del DOJ, Sophia Suarez, remitió una carta al juez encargado del caso, Trevor McFadden, con la decisión tomada por la oficina de la fiscal general Pam Bondi.
«Estimado juez McFadden: El gobierno respetuosamente envía esta carta para informar a la corte y a la defensa que la fiscal general ha autorizado y ordenado a esta oficina no perseguir la pena de muerte contra el acusado Miguel Treviño Morales y el acusado Omar Treviño Morales», reza el documento.
A Miguel Ángel y Omar Treviño Morales, alias Z-40 y Z-42, y quienes arribaron a suelo estadounidense tras ser entregados por la Administración mexicana de Claudia Sheinbaum en febrero, se les acusa de tráfico de cocaína y marihuana, crimen organizado, lavado de dinero y posesión de armas de fuego.
Su próxima audiencia está prevista para el 14 de octubre en una corte federal del Distrito de Columbia, donde se encuentra la capital Washington D.C.
EE.UU. les adjudica haber dirigido presuntamente una violenta red criminal que, entre los años 2000 y 2011, transportó grandes cantidades de estupefacientes a ciudades estadounidenses a lo largo de la frontera con el noreste de México, con Texas como principal punto de entrada.
Expertos en narcotráfico y seguridad coinciden en señalar a «Los Zetas» como uno de los carteles mexicanos más brutales y violentos, con un historial colmado de asesinatos en masa, atentados contra población civil y muestras públicas de terror para amedrentar a las comunidades bajo su control.
Ahora, el devenir legal de los hermanos Treviño Morales, cuya organización operó como brazo armado del Cartel del Golfo antes de empezar a trabajar en solitario, continúa así un camino paralelo al de otros narcotraficantes mexicanos como Rafael Caro Quintero.
El conocido como «Narco de Narcos» también llegó como parte de ese grupo de 29 criminales de la droga que EE.UU. requirió y Sheinbaum envió en febrero.
Caro Quintero y los Treviño Morales eran los de más alto perfil en esta transferencia, y el Departamento de Justicia de EE.UU. ya ha anunciado que ninguno de ellos enfrentará finalmente la pena de muerte.
Al igual que tampoco se aplicará el castigo capital en el caso de otras tres figuras cruciales para el narcotráfico mexicano y ahora bajo custodia estadounidense: Ovidio Guzmán -hijo de «El Chapo» y alias «Ratón-, Joaquín Guzmán López -también vástago de «El Chapo» y apodado «El Güero»- e Ismael «El Mayo Zambada», otrora cerebro del Cartel de Sinaloa. EFE/ir