-El presidente Hernández ordenó a las Fuerza Armadas actuar ante cualquier amenaza al territorio hondureño.
Según el funcionario, “a raíz los resultados positivos, hemos frenado el paso de la droga en el país y eso significa que este tipo de bandas criminales van a reaccionar de una u otra manera”
Reiteró que hasta la fecha, se ha limitado el ingreso de droga al país tanto por la vía aérea, terrestre o marítima.
Señaló que por órdenes del presidente Juan Orlando Hernández, las Fuerzas Armadashan sido instruidas para que hagan efectivo el escudo aéreo, marítimo y terrestre en la región caribeña del país, y advirtió que cualquier amenaza o ataque será repelido.
El gobierno ordenó un bloqueo aéreo en el Caribe del país, que se suma a otro en el mar, coordinado con Estados Unidos a través de patrullas del Servicio de Guardacostas en aguas internacionales, para frenar el narcotráfico.
En medio de las acciones que ejercen las fuerzas de seguridad en su lucha contra el narcotráfico, el mandatario Hernández denunció en las últimas horas que personas extranjeras están tratando de boicotear los escudos aéreo, marítimo y terrestre que se ha establecido en el sector de la Mosquitia, Caribe de Honduras.
El 29 de enero de este año, dos días después de la toma de posesión del presidente Juan Hernández, en las instalaciones de la Empresa Nacional Portuaria (ENP), se logró el decomiso de 2 mil 098 kilos de cocaína.
La gran cantidad de la droga venía a bordo de un contenedor procedente de Cartagena, Colombia, y estaban dirigidos a una empresa comercial de San Pedro Sula, norte del país.
Las dos toneladas de droga, que su valor en el mercado estadounidense asciende a unos 80 millones de dólares, estaban ocultas en láminas huecas de tabla yeso.
El decomiso de precursores químicos es otro hecho que se repite con regularidad, tanto en la aduana de Puerto Cortés como en la terminal aérea sampedrana.
Cabe recordar que el 5 de febrero, agentes de la Policía de Fronteras incautaron en el aeropuerto Ramón Villeda Morales de San Pedro Sula, una docena de barriles con supuestos precursores químicos para la elaboración de droga.
Además, el 5 de marzo, la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN), reportó el decomiso en la aduana de Puerto Cortés de 240 barriles conteniendo supuestos precursores químicos que se utilizan para la elaboración de drogas.
El producto decomisado venía procedente de Bogotá, Colombia, y el destino final era para una empresa ubicada en la norteña ciudad de San Pedro Sula. Cada barril contenía 55 galones de ácido clorhídrico, un ingrediente esencial para la elaboración de drogas sintéticas.
Entretanto, el 8 de marzo mediante intensos operativos de la Fuerza Nacional Antievasión en los predios de la ENP, se hizo la incautación de armas, municiones y cargadores.
Entre las armas confiscadas figura un fusil 223 Remington, una pistola escuadra 360, dos cajas de munición; una de nueve milímetros con 50 cartuchos, así como otra de 25 cápsulas de munición Remington y una mira telescópica para Remington.
El cargamento fue enviado desde Miami, Estados Unidos, según lo confirmó la Policía.
También, el pasado 12 de marzo, miembros de la Policía Nacional y del Ejército hondureño, decomisaron un contenedor con supuesto químico para elaborar droga, siempre en la Empresa Portuaria.
El último decomiso data de la presente semana, cuando agentes asignados a la Fuerza Nacional de Seguridad Interinstitucional (Fusina), detectaron dentro de un contenedor, al menos mil proyectiles para fusil AK-47, los que venían desde Estados Unidos y fueron encontrados en los predios de la Portuaria.
Sin embargo, en la Mosquitia hondureña, que había sido escogida por el crimen organizado como centro de operaciones, la narcoactividad se ha reducido considerablemente, según ha asegurado el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Fredy Díaz.
Señaló que en lo que va del año, solamente se reportan dos narcoavionetas que se han atrevido a aterrizar en el territorio de la Mosquitia y desde la aprobación de la Ley de Exclusión Aérea, no se registran vuelos sospechosos en esa vasta región.
No obstante, manifestó que la actividad del narcotráfico a través de la zona marítima es todavía un problema por lo que se ha reforzado el escudo marítimo que cuenta con la colaboración del Servicio de Guardacostas de Estados Unidos que vigila las aguas internacionales aledañas al territorio hondureño.
