Tegucigalpa – En su homilía dominical, el Cardenal hondureño, Óscar Andrés Rodríguez, hizo un llamado a la población hondureña para que en las próximas elecciones generales del 28 de noviembre, vayan a las urnas a elegir con conciencia para cambiar la realidad del país y recibir frutos en el futuro.
– Ojalá la vacuna contra el COVID-19 llegue pronto para todos, dijo el líder religioso.
Inicialmente, dijo que los hondureños deben imitar a Jesús, además ser sus discípulos “para que en momentos en que se sientan agobiados, por la falta de resultados en su misión, sin descuidar que el resultado no depende solo de nosotros, sino también del Señor, él hace el resto”.
El cardenal, añadió que la semilla de mostaza, es la almendra del Señor que germina por sí misma, mientras el sembrador descansa “primero el tallo, luego la espiga y después el grano, recordemos que nuestra trasformación humana es progresiva requiere tiempo, integrar el mensaje de Jesús, no es cosa de un día sino de toda la vida”.
Se refirió a la pandemia del COVID-19, al respecto expuso que la misma se ha extendido, pero que no hay que desesperarse “ya que es Dios, el que sabe cuánto tiempo más durará, mientras tanto, hay que colaborar para que no suceda lo que pasó en otros países, que aún vacunados, tuvieron que volver atrás porque olvidaron la bioseguridad”.
En ese sentido, complementó que espera que toda la población hondureña pueda recibir las vacunas contra el COVID-19 más pronto que tarde y que cuando se esté inmunizado contra el mortal virus, no se descuide el compromiso de seguir cumpliendo con las medidas de bioseguridad, porque es Dios quien sabe cuándo esa semilla, va a dar sus frutos.
De esta manera, recomendó a sembrar en tierra buena para que haya cosecha, pero eso solo puede ser logrado hombres y mujeres que no le ponen excusas al mensaje de Dios, porque la vida no puede reducirse a trabajos, resultados o rendimientos, “no olvidemos que la vida es un regalo y debemos respetarla así como manda el evangelio”.
“Hay que sembrar mostaza, Jesús es ejemplo de ello, llegó para dar frutos y hacer el bien, quienes lo necesitan de ese árbol ojalá, puedan cobijarse en sus ramas, me refiero a aquellos marginados y olvidados de la sociedad, quienes no tienen ninguna esperanza” añadió el cardenal.
Recordó que esta semana “los hermanos de la Conferencia Episcopal, hemos emitido un mensaje para la reflexión de todos y cada uno de nosotros en la actividad política que se avecina, siempre aquellos que rechazan el Santo Evangelio, tienen listas las espadas y los puñales de la crítica para no recibir el mensaje”
Otros dicen y que pueden hacer los Obispos, la Iglesia y los sacerdotes para cambiar esta sociedad que no quiere cambiar, que quiere seguir en lo mismo, pero el evangelio lo dice que aunque sea una semillita de mostaza dará frutos
Recordó que aquellos ciudadanos que no saben qué hacer frente a la realidad del país, deben reflexionar en torno al pronunciamiento de la Conferencia Episcopal, porque ahí se señala la manera en cómo hacer cambiar la sociedad “es votar en conciencia, eso es recibir la pequeña semillita de mostaza para que pueda dar frutos”.
“Pidamos al Señor que nos conceda confianza, humildad, colaboradores en la obra de humanización de este mundo, para que nunca perdamos la fe y la esperanza, que no son los poderosos, ni el G-7 quienes dirigen el mundo, sino el amor de Dios quien nos ama”, concluyó. JP
