Roma – El boceto pintado por Goya para retratar a María Teresa de Vallabriga a caballo ha salido del depósito de la Gallería de los Uffizi de Florencia para exponerse este miércoles al público, en una muestra que se adentrará en el Siglo de las Luces.
«El objetivo es mostrar un siglo complejo a través de su cultura estética», explicó en un comunicado el director de esta importante pinacoteca italiana, Simone Verde.
Entre las obras expuestas está el boceto preparatorio que Goya pintó en 1783 para un retrato -actualmente perdido- de María Teresa de Vallabriga, esposa del infante Luis Antonio de Borbón, conde de Chinchón y hermano de los reyes Fernando VI y Carlos III.
En el cuadro, la mujer aparece a caballo, con sombrero, tocado y traje de montar de terciopelo azul, tomando con determinación las riendas y mirando adelante pese a la tempestad que se cierne sobre el paisaje montañoso y pedregoso que la rodea.
La pintura se encontraba en los archivos de los Uffizi, que cuenta con otros dos cuadros del maestro español, un retrato de Maria Teresa de Borbón y Villabriga, futura condesa de Chinchón y esposa de Godoy, realizado en el 1800 y custodiado en sus depósitos, y otro de un torero pintado en el 1797.
El museo florentino mostrará de nuevo al público este retrato ecuestre dentro de una exposición que pretende resaltar hasta el próximo 28 de noviembre el valor artístico del siglo XVIII europeo.
Para ello, la muestra, comisariada por Alessandra Griffo, reúne unas 150 piezas entre pinturas, esculturas, mobiliario, porcelanas, tapices y grabados de maestros como Giambattista Tiepolo, Canaletto o la francesa Élisabetch Vigée Le Brun.
La intención, apuntan desde los Uffizi, es narrar el arte de una época de cambios cruciales para el pensamiento y la estética occidentales y celebrar el nacimiento de este museo en 1769, enriquecido con las obras acumuladas en los siglos anteriores por los Medici y otros nobles toscanos.
«Las obras expuestas, además de mostrar una gran calidad, permiten conocer un siglo clave para la formación de la mentalidad, de la sensibilidad e incluso del gusto moderno. Actualmente a Florencia llega cada año un millón de personas atraídas por el mito del primer Renacimiento. El descubrimiento de ese periodo se produjo, de hecho, durante el XVIII», defendió Griffo. EFE