Tegucigalpa/Washington/San Salvador – Estados Unidos redobló su lucha contra la corrupción a nivel global al lanzar una nueva estrategia y en el ámbito centroamericano con sanciones a funcionarios del gobierno salvadoreño, cercanos al presidente Nayib Bukele.
– Dos funcionarios fueron incluidos en la Ley Magnitsky, por sus negociaciones con las pandillas MS-13 y Barrio 18.
– Washington considera que estados con corrupción endémica beneficia a las redes terroristas y traficantes.
Mientras simultáneamente inauguraba una Cumbre sobre la Democracia, a la cual no fueron invitados los presidentes del bloque Centroamérica-4, Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua.
Primero la Casa Blanca divulgó la nueva Estrategia Nacional contra la Corrupción, donde destacan que dicho mal es un problema a la seguridad Nacional de Estados Unidos.
Este miércoles el Departamento del Tesoro estadounidense anunció sanciones contra el director de Centros Penales de El Salvador, Osiris Luna, así como el responsable de Reconstrucción del Tejido Social, Carlos Marroquín por corrupción y por mantener encuentros con líderes de las pandillas Mara Salvatrucha (MS-13) y el Barrio 18, a fin de reducir los niveles de violencia durante la administración del presidente Bukele.
«El Tesoro seguirá desmantelando de manera agresiva los vínculos entre las organizaciones criminales y la actividad corrupta, especialmente de aquellos en cargos que cuentan con la confianza de los ciudadanos», señaló Andrea M. Gacki, directora de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, en inglés).
Según Washington Luna y Marroquín «dirigieron, facilitaron y organizaron» una serie de encuentros con líderes de la pandilla encarcelados, como parte de los esfuerzos del Gobierno salvadoreño para negociar «una tregua secreta» con los jefes de la MS-13.
El comunicado de la OFAC señala que la designación de Luna y Marroquín obedecen a la aplicación de la Ley de derechos Humanos Global Magnitsky y que “apuntan al nexo entre la corrupción pública y el crimen organizado”.
Luna también es acusado, junto a su madre, de desviar alimentos adquiridos por el gobierno para beneficiar a los afectados por la pandemia del COVID-19. Pero según la acusación del Tesoro los productos eran desviados y revendidos en el mercado privado, para lo cual contó con la ayuda de su madre, Alma Yanira Meza, según la acusación.
Bukele reacciona
El presidente Bukele reaccionó en su cuenta de Twitter con interrogantes a las acusaciones de Washington contra su administración y sus dos funcionarios. “¿Celulares y prostitutas en las cárceles?”, “¿Dinero a las pandillas?”, “¿Cuándo pasó eso?”, “¿No revisaron ni la fecha?”, “¿Cómo pueden poner una mentira tan obvia sin que nadie se las cuestione?”
Indicó que los videos existentes son de las negociaciones de gestiones anteriores a las suyas y que considera son amigos de Estados Unidos, no de su administración.
Bukele reveló en la misma cuenta que la exencargada de negocios estadounidense en El Salvador, Jean Manes, le pidió la liberación del exalcalde de Sal Salvador, Ernesto Muyshondt, encarcelado por tratos con las pandillas según acusación de la Fiscalía, la no reelección del fiscal general Rodolfo delgado, el compromiso de no atacar al expresidente Alfredo Cristini y Douglas Meléndez, así como detener los arrestos de las personas implicadas en sobresueldos.
Igualmente Bukele reveló que mantuvo una reunión con el nuevo encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos en San Salvador, Brendan O’Brien, y a quien le manifestó que El Salvador estaba interesado en reparar la relación con Washington.
Nuevo grupo anticorrupción
Estados Unidos anunció una nueva estrategia global contra la corrupción y en la cual anuncia la creación de una nueva fuerza anticorrupción que operará a nivel global y bajo el liderazgo del Departamento del Comercio.
La nueva fuerza busca desmantelar los grupos corruptos y sus vínculos con la dirigencias políticas, redes terroristas, criminales y traficantes.
“Cuando los funcionarios del gobierno abusan del poder público para obtener beneficios privados, hacen más que simplemente riqueza ilícita apropiada. La corrupción priva a los ciudadanos del acceso igualitario a los servicios vitales, negando el derecho a una atención médica de calidad, seguridad pública y educación. Degrada el entorno empresarial, subvierte las oportunidades económicas y agrava la desigualdad”, destaca el documento estadounidense, que también señala que la corrupción vacía las instituciones y corroe la confianza pública”, señala el documento.
La nueva estrategia señala que los actores corruptos sobornan fuera de las fronteras, aprovechan el sistema financiero internacional para esconder riquezas ilícitas en el extranjero y abusan de las instituciones democráticas.
En ese sentido destaca que las investigaciones y las publicaciones periodísticas han documentado que las deficiencias legales y reglamentarias en el mundo ofrecen a los actores corruptos los medios para “deslocalizar y blanquear riquezas ilícitas”, lo que son aprovechados por autócratas que tienen la capacidad de cooptar y recompensar a las élites. (PD)