Los conductores de taxis, de barrido, es decir que no pertenecen a puntos de taxi colectivo, tienen aparcadas sus unidades en la primera, segunda y tercera avenida de Comayagüela y en el centro de Tegucigalpa.
El dirigente de la organización, Emilio Baca, dijo que ellos como organización no aceptan el incremento de un lempira que el gobierno autorizó al pasaje colectivo.
El alza del transporte público en las diferentes modalidades es probablemente el azote más grande que ha afectado a los hondureños en el primer trimestre de 2012.
No obstante, los trasportistas no se conforman y pretenden más incremento o ajustes a las tarifas; ante la pasividad de las autoridades del rubro, algunas de las cuales también forman parte del gremio del transporte.
Baca explicó que ellos demandan al gobierno un subsidio en el precio de la bomba de 30% por cada galón de combustible, asimismo indicó que de no ser aprobada esa petición, el gobierno debe extender el bono compensatorio que ellos reciben al año.
Los taxistas recibieron un bono compensatorio de 14,000 lempiras el año pasado, pero ahora quieren que el gobierno lo incremente en 20,000 lempiras.
Según el directivo de la Ataxish, esa organización alberga al 75% de los taxistas a nivel nacional que operan directamente con el usuario.
Señaló que el gobierno con quien firmó el incremento de un lempira fue con el otro 25% de los taxistas que pertenecen a puntos de taxis.
