Tegucigalpa – “Creo que el Banco Central tomó la mejor decisión (subida de la Tasa de Política Monetaria) porque si lo hubiera hecho en 2022 que venía de una situación bastante crítica por la pandemia (COVID-19) y por las dos tormentas tropicales, en ese momento se hubiesen incrementado las tasas de interés lo que hubiera provocado que el sector productivo no se restableciera como se hizo que permitió un crecimiento de 4.1 % en el 2022”, expresó el vicepresidente del Congreso Nacional, Hugo Noé Pino.
Dijo que el Banco Central de Honduras (BCH), una de sus misiones es vigilar el sistema de precios en el país para controlar la inflación, y en base a ello hace los ajustes necesarios a las tasas de interés.
Explicó que el BCH tiene tres mecanismos específicos: tasa de interés, operaciones de mercado abierto y el encaje, en este caso se está utilizando la Tasa de Política Monetaria para prevenir presiones inflacionarias que se dan en la economía.
Justificó que ante la subida de la TPM hay otras medidas compensatorias como ser los recursos que van destinados para financiar viviendas de clase media por parte de Banco Hondureño para la Producción y la Vivienda (Banhprovi), institución que ha reafirmado que mantendrá las tasas de interés.
En tanto, -citó Noé Pino- en el sector de la agricultura se proporcionaron cerca de 2 mil millones de lempiras al Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (Banadesa).
Noé Pino aceptó que en algunos sectores habrá ajustes en las tasas de interés por parte del sistema financiero, aunque se financia el consumo a través de las tarjetas de crédito y ese es uno de los objetivos reducir los niveles de demanda agregada en la economía para evitar las demandas inflacionarias.
Ahondó que la TMP se vincula con el tipo de cambio porque al restringirse los niveles de acceso a lempiras se disminuye la demanda de dinero en la subasta de divisas dándole mayor estabilidad al tipo de cambio, “ese es uno de los objetivos porque si no se generan presiones inflacionarias”, dijo. JS
