“Sentimos que ésta inconstitucionalidad que se está promoviendo en las pruebas de confianza, fue un circo que se estaba montando para hacernos creer que se estaban impulsando acciones que pueden terminar en el fracaso”, expresó Murillo en la presentación del Boletín Especial sobre los Hechos Criminales y Delictivos con Policías Involucrados, dado a conocer en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Después de que la rectora Julieta Castellanos, diera a conocer la alarmante cifra de que 149 hondureños han muerto a manos de agentes policiales desde enero de 2011 hasta noviembre de 2012, Murillo expresó que como miembro de la Alianza está tratando de promover una reforma integral en el sistema de justicia con el fin de cambiar el oscuro panorama actual en el ámbito de seguridad pública.
Reformar el Ministerio Público
Ante los 149 crímenes cometidos por policías, el funcionario demandó la vinculación de la sociedad civil en la promoción de reformas en los entes operadores de justicia y seguridad ciudadana.
“Necesitamos la presencia fuerte de la sociedad civil en estos cambios que se están promoviendo, tales como la reforma nacional del Ministerio Público, el cual está coludido con el narcotráfico, vimos a través de varios documentos de que están implicados en casos ilícitos y eso no lo puede seguir tolerado el pueblo hondureño”, señaló Murillo.
A lo que agregó, “estamos viviendo en un Estado corrupto que promueve la impunidad, que no garantiza los derechos ciudadanos y nuestro derecho a la seguridad queda en el olvido, queremos un sistema que nos proteja, no queremos operadores de justicia que están coludidos con el crimen organizado”.
El profesional del derecho exigió que la evaluación del Ministerio Público debe ser una gestión de carácter urgente por parte de las autoridades del Estado hondureño.
Policía comunitaria
Para poder depurar y renovar el cuerpo policial hondureño, Murillo dijo que la propuesta de una Policía Comunitaria que se presentó a la Comisión de la Reforma en Seguridad Pública, generaría una autodepuración en el cuerpo policial.
“La policía comunitaria sería la más cercana a la ciudadanía, es una respuesta viable que generaría una autodepuración, porque los policías que están acostumbrados a los sistema oscuros, no podrían ajustarse a esa nueva policía comunitaria”, dijo.
En ese sentido, informó que ya se está trabajando con el secretario de Seguridad Pompeyo Bonilla y el director de la Policía Nacional, Juan Carlos Bonilla, para integrar a la sociedad civil en la creación de mecanismos que mermen la corrupción y criminalidad en los entes encargados de brindar seguridad a la población.
El pasado martes, la Sala de lo Constitucional decidió declarar inconstitucional las pruebas de confianza practicadas por la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP), como parte de la Ley Especial de Depuración Policial que autoriza esos instrumentos científicos.