San Pedro Sula – Por quinto día consecutivo se realizan aseguramientos de bienes al extraditado Héctor Emilio Fernández Rosa, alias “Don H”, y las autoridades contabilizan 38 propiedades de las 57 que se inmovilizarán en los departamentos de Cortés y Yoro, norte de Honduras.
– Un salón de belleza y varias tiendas de juguetes fueron inmovilizadas este día.
El portavoz de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), José Coello, dijo que en los operativos de aseguramiento suman hasta el momento 38 propiedades de las cuales solo una se encontró en abandono.
Indicó que solo en el municipio de Omoa se contabilizan 12 propiedades.
Agregó que este día se están llevando a cabo aseguramientos en la residencial Villas Mallorca de San Pedro Sula, al tiempo que añadió que la residencia está arrendada por lo que las personas tendrán que realizan un nuevo contrato con la Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI).
Las operaciones de este viernes comenzaron a las 9:00 de la mañana en El Negrito, Yoro, donde se inmovilizó una propiedad de 130 manzanas de tierra las cuales están divididas en seis lotes y tres viviendas.
Entre tanto el segundo aseguramiento tuvo lugar en Mall Galería. Ahí se tomó posesión de dos locales: un salón de belleza y una tienda de juguetes.
Asimismo, se aseguraron cuatro locales de venta de ropa y juguetes en Plaza Río Piedras.
El capo autónomo que lloró en su captura
La captura de “Don H” se realizó en una exclusiva zona de El Hatillo, en Tegucigalpa. En su momento se le señaló de ser el jefe supremo de su propia organización, además de trabajar con otros carteles en Honduras.
Por muchos años el perfil del “Don H” era imperceptible, sobre él no se mencionaban detalles ni de parte de las autoridades, ni de los medios de comunicación.
Originario de La Entrada, Copán, en el momento de su captura Héctor Emilio Fernández Rosa, fue presa de una crisis nerviosa. Lloró y en todo momento bajó el rostro.
Recluido en el Primer Batallón de Infantería -antes de ser extraditado- “Don H” contrajo nupcias y fue la única vez durante el proceso judicial que se le notó feliz.
