Tegucigalpa – Las autoridades policiales confirmaron que la mañana de este sábado, fueron trasladados a la cárcel de máxima seguridad de la Penitenciaría Nacional de Támara en Francisco Morazán a los nueve agentes de la Tropa de Inteligencia y Grupos de Respuesta Especial de Seguridad (TIGRES), acusados de sustraer 1.3 millones de dólares durante un operativo que derivó en la captura de los hermanos Miguel Arnulfo y Luis Alonso Valle Valle en octubre de 2014.
El pasado 3 de marzo un juez con jurisdicción nacional determinó dictar auto de formal procesamiento con detención judicial contra los nueve agentes, quienes han venido guardando prisión en las celdas del Cuartel de Operaciones Cobras, a la espera de que se celebre la audiencia preliminar en un término de 60 días.
No obstante esta mañana fueron trasladados a celdas de máxima seguridad, confirmó a Proceso Digital el portavoz de la Policía Nacional, subcomisionado Leonel Sauceda.
“Los nueve (agentes) fueron trasladados esta mañana hasta la Penitenciaría Nacional, a cárcel de máxima de Seguridad y a un aérea segregada y aislada de los demás reos del lugar”, confirmó el oficial.
Refirió que la determinación de traslado fue tomada en respuesta a la decisión del juez de jurisdicción nacional que conoce el caso.
Los imputados son acusados por el Ministerio Público por los presuntos delitos de abuso de autoridad, hurto agravado y sustracción de evidencias.
Los nueve agentes imputados son: Obed Hernández, Edwin Midence, Alejandro Díaz, Luis Godoy, Guillermo Dávila, Gerson Alemán, Elmer Mendoza, Lot Pérez Avelar, y el oficial Pedro Zúniga.
Cabe señalar que el pasado 17 de febrero, el Ministerio Público presentó requerimiento fiscal contra los nueve integrantes del cuerpo élite TIGRES por los tres delitos anteriormente descritos.
Posteriormente los agentes procedieron a presentarse a los tribunales en compañía de sus apoderados legales y el juez de turno les dictó auto de prisión.